Caravana

Los últimos domingos de cada mes, una caravana por Cuba en Estados Unidos

Foto: Leydi Torres Arias

El último domingo del mes queda reservado en mi agenda con una sola palabra: Caravana.

Así, como quien anota un cumpleaños, un evento importante, una fecha que no puede posponerse. Caravana. Ese día es de levantarse temprano, manejar varios kilómetros para llegar al punto de salida, cantar el himno nacional de Cuba, poner bandera y carteles al carro, y partir. En Caravana.

Foto: Leydi Torres Arias

En algún punto del recorrido, invariablemente, escucho a Silvio. ‘’El necio’’ se ha convertido en mi canto personal:

‘’Será que la necedad parió conmigo

La necedad de lo que hoy resulta necio

La necedad de asumir al enemigo

La necedad de vivir sin tener precio’’.

El último domingo del mes es, además, día de reencuentro. Quienes solo se conocían a través de canales de YouTube, de redes sociales, de mensajes, ahora ponen voz y rostro a sus nombres. Cuba los une. La Caravana es por Cuba.

Foto: Leydi Torres Arias

La convocatoria invita a ‘’demócratas, republicanos, cubanos y no cubanos, gente de diversos credos e ideologías de todos los confines, a una caravana contra el embargo a Cuba, y a favor de la familia cubana.’’

Una caravana, porque lo que comenzó hace meses como un recorrido aislado en bicicleta, ahora es toda una caravana.

Desde Seattle, Carlos Lazo, sus hijos y sobrinos, partieron en julio del 2020 rumbo a Washington, pedaleando más de 5 mil kilómetros, con el objetivo de cubrir Estados Unidos de costa a costa, pedir el levantamiento del bloqueo y tender “puentes de amor”.

Desde Miami, Jorge Medina —el Protestón Cubano— a finales de julio pasado, salió en bicicletada con diez personas más que se le unieron. Desde entonces, la cita ha sido el último domingo del mes y en cada ocasión asisten más personas.

En noviembre, por primera vez, Carlos Lazo y Jorge Medina coincidieron en una caravana. En Miami.

Este domingo 28 de febrero, la cita tuvo varias singularidades:

Abarcó ocho ciudades —ocho— de Estados Unidos y Canadá: Miami, Seattle, New York, Washington DC, Los Ángeles, Minneapolis, Ottawa y Montreal.

Y algunas personas se unieron en una suerte de comité organizador, para enviar

comunicados, realizar una conferencia de prensa, ocuparse del orden, o llevar las banderas. El tiempo individual está siendo un tiempo colectivo. Los que quieren el fin de las sanciones que pesan sobre el pueblo cubano, se hacen escuchar.

En esta ocasión también asistió Max Lesnik, periodista cubano residente en Miami, quien expresó: ”En esta caravana popular, donde están representadas todas las corrientes ideológicas, estamos presentes porque Cuba nos reclama. El pueblo cubano de allá y el de acá es el mismo pueblo que pide que eliminen el bloqueo inhumano y criminal dictado por una política mezquina. ¡Abajo el bloqueo!”.

Y a la voz de Lesnik se sumaron las otras voces: ¡Abajo!

Hay muchas, muchísimas personas, unidas con un propósito común, con una sola Cuba en las entrañas. Esa Cuba que ha logrado que el último domingo del mes quede reservado —no solamente en mi agenda— con una sola palabra: Caravana.

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