Guardia Costera estadounidense repatría a 23 cubanos interceptados cerca de Florida

Desde el 1 de octubre pasado, la Guardia Costera ha detenido en el mar a 183 cubanos que intentaban llegar a la costa estadounidense, lo que representa un aumento considerable comparado con los 40 interceptados en el año fiscal del 2020.

Foto: @USCGSoutheast/Twitter.

Una de las embarcaciones a borde de la cual navegan los cubanos. Foto: @USCGSoutheast/Twitter.

La Guardia Costera estadounidense repatrió este martes a 23 cubanos que intentaron llegar ilegalmente al país tras interceptar las embarcaciones en las que viajaban en tres operaciones en aguas de los Cayos de Florida, informó la institución.

La primera operación la realizaron los guardacostas de la base de Islamorada en aguas cercanas a Cayo Largo (extremo sur de Florida), donde interceptaron una pequeña embarcación con inmigrantes cubanos a bordo.

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La segunda interceptación se produjo el viernes pasado, cuando la Guardia Costera de la estación de Marathon localizó una embarcación de inmigrantes, luego de que un avión de la Estación Aérea de la Guardia Costera de Miami informara de la presencia de la embarcación de unos 15 pies (4 metros) a 36 millas (57 kilómetros) al sureste de Marathon.

En la tercera, un «buen samaritano» localizó a un grupo de inmigrantes en una embarcación al sur de Cayo Hueso.

Desde el 1 de octubre pasado, la Guardia Costera ha parado en el mar a 183 cubanos que intentaban llegar a la costa estadounidense, lo que representa un aumento considerable comparado con los 40 interceptados en el año fiscal del 2020.

«Hemos visto un aumento del 80 % en la actividad migratoria desde enero pasado, en relación con los últimos años», dijo en un comunicado el capitán Adam Chamie, comandante del sector de la Guardia Costera de Cayo Hueso».

En la mayoría de los casos, agregó, los inmigrantes que intentan ingresar ilegalmente a Estados Unidos lo hacen a bordo de «embarcaciones improvisadas que no están en condiciones de navegar».

Son embarcaciones que la mayoría de la veces, alertó Chamie, «están peligrosamente sobrecargadas, les entra agua y no están equipadas para transportar de manera segura a personas».

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