Artistas cubanos piden retirar sus obras del Museo Nacional de Bellas Artes

El grupo exige que sus obras exhibidas en las salas de exposición permanentes y temporales del Museo Nacional de Bellas Artes “sean cubiertas de forma tal que se impida su comunicación con el público y que también sean retiradas de la página web del Museo aquellas que no están exhibidas” mientras no se cumplan sus demandas, entre las que se cuenta la liberación del activista opositor Luis Manuel Otero Alcántara, ingresado desde hace tres semanas en un hospital habanero.

Edificio de arte cubano del Museo Nacional de Bellas Artes, en el entorno de la calle Monserrate, en La Habana. Foto: Otmaro Rodríguez.

Edificio de arte cubano del Museo Nacional de Bellas Artes, en el entorno de la calle Monserrate, en La Habana. Foto: Otmaro Rodríguez.

Reconocidos artistas contemporáneos cubanos pidieron este lunes la retirada de sus obras del Museo de Bellas Artes de La Habana en protesta por la situación actual del también artista y activista opositor Luis Manuel Otero Alcántara, ingresado e incomunicado en un hospital habanero desde hace tres semanas.

La también opositora Tania Bruguera —una de las líderes de los artistas que se manifestaron el pasado 27 de noviembre frente al Ministerio de Cultura—, así como Tomás Sánchez, Marco Castillo —exintegrante de Los Carpinteros—, Jorge Luis Marrero, Sandra Ceballos, Celia-Yunior y Reynier Leyva Novo, expresaron la petición en una carta que entregaron en mano al director del Museo Nacional de Bellas Artes, Jorge Fernández Torres.

Demandas de los artistas

El grupo exige que sus obras exhibidas en las salas de exposición permanentes y temporales del Museo Nacional de Bellas Artes “sean cubiertas de forma tal que se impida su comunicación con el público y que también sean retiradas de la página web del Museo aquellas que no están exhibidas” mientras no se cumplan sus demandas.

Estas son la liberación inmediata y vuelta a casa de Luis Manuel Otero Alcántara —a quien consideran “secuestrado“ y no ingresado en el hospital para un tratamiento médico—, la garantía de acceso a sus allegados para comprobar su estado de salud, y la eliminación del “cerco policial” al que, aseguran, el Gobierno somete al artista.

“Decidimos sacarla con seis nombres y se están uniendo otros artistas”, declaró a la agencia española EFE Tania Bruguera, conocida por sus performances de tema político y por haber participado en eventos en la Tate Modern de Londres y el Museo de Arte Moderno (MoMA) de Nueva York, y quien ha denunciado llevar más de tres meses de arresto domiciliario en La Habana.

Bruguera aseguró que algunos de los firmantes tienen buena relación con el Museo de Bellas Artes, por lo que espera que su director “se posicione en defensa de los artistas, ya que el Ministerio de Cultura no lo ha hecho”.

Tres semanas ingresado

Luis Manuel Otero Alcántara, de 33 años y declarado recientemente “preso de conciencia” por Amnistía Internacional, fue internado el 2 de mayo en el hospital habanero Calixto García, después de declararse una semana en huelga de hambre y sed para, según sus demandas, protestar contra el acoso policial y la destrucción de varias de sus obras.

Tras su ingreso, que sus allegados y otros opositores denunciaron como “forzoso”, las autoridades cubanas afirmaron que sus signos vitales e indicadores de salud estaban bien y no se correspondían con los de una persona en huelga de hambre. Sin embargo, tres semanas después permanece ingresado sin que se conozca oficialmente la causa médica de su permanencia en el hospital.

Cuba: artista opositor en huelga de hambre es internado en hospital de La Habana

Organizaciones, activistas y allegados del opositor exigen desde hace días su liberación al considerar que permanece retenido contra su voluntad en el centro hospitalario, que mantiene un fuerte dispositivo de seguridad. De acuerdo con ellos, a Otero Alcántara no se le permite realizar llamadas telefónicas, conectarse a internet ni recibir visitas de su pareja y amigos.

Algunos videos y fotos suyas en el hospital publicadas en las redes sociales han desatado críticas y especulaciones, y han alentado preocupaciones acerca de su estado físico e incluso mental, sin que haya hasta el momento un pronunciamiento o dictamen oficial sobre su situación.

Hasta ahora, el Estado cubano, sus instituciones y medios oficiales han acusado a los artistas críticos, activistas opositores y periodistas independientes de realizar actividades subversivas financiadas por Estados Unidos, como parte de una campaña de descrédito y un “golpe blando” contra el gobierno de la Isla, mientras la otra parte acusa al gobierno de restringir la libertad de expresión y creación, y de acallar las voces críticas con tácticas represivas.

EFE / OnCuba

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