El gobierno de China prepara un donativo para Cuba para el enfrentamiento a la pandemia de COVID-19, como parte de la asistencia internacional que brinda el país asiático por la experiencia acumulada en lucha contra la enfermedad.
El embajador cubano en Beijing, Carlos Miguel Pereira, aseguró en las redes sociales que el aporte de la nación asiática “está listo y llegará muy pronto” a Cuba, según reporta la agencia Prensa Latina (PL), que, no obstante, no detalla en qué consiste la donación.
El diplomático agradeció el gesto, así como “el número creciente de empresas chinas, con históricos vinculos con la Isla, que han expresado su intención de enviar donaciones” y aseguró que las mismas “sin dudas fortalecerán nuestras capacidades nacionales en el enfrentamiento a la COVID-19”.
La cancillería china informó esta semana que, además de Cuba, también ha enviado o enviará asistencia a un importante grupo de naciones, incluidas algunas que sufren en estos momentos las terribles consecuencias del brote, como Italia, Francia, España, Irán y Corea del Sur, así como otras que están en momentos iniciales de transmisión del coronavirus.
Según el reporte de prensa, la asistencia ya brindada por China a algunos países incluye insumos, equipos médicos y expertos que han participado en el enfrentamiento a la COVID-19. Ello se une a una donación de 20 millones de dólares a la Organización Mundial de la Salud (OMS) por esta misma causa.
“Es una tradición en China retribuir la buena voluntad con más amabilidad. Nunca olvidaremos el apoyo político de la comunidad internacional durante los momentos más difíciles ni tampoco los suministros recibidos de 79 naciones y 10 organizaciones globales”, afirmó un vocero de la cancillería china citado por PL.
Tras el inicio del brote del coronavirus en China, el gobierno de Cuba transmitió su solidaridad con ese país, algo que agradeció el presidente Xi Jinping a su homólogo cubano Miguel Díaz-Canel.
Xi agradeció a Díaz-Canel mantener “intercambios y cooperación normales” durante la epidemia, algo que, añadió, «representa respeto y apoyo a los trabajos de prevención y control de China”, en el contexto del 60 aniversario del establecimiento de relaciones entre ambos países.
“China y Cuba son buenos amigos, camaradas y hermanos que pueden confiar el uno en el otro en los tiempos de dificultad, y que son tan cercanos como los labios y los dientes”, dijo, y renovó su compromiso de ofrecer a Cuba “ayuda y asistencia dentro de lo posible”.
La ayuda de Cuba al país asiático se manifiestó en la utilización para el tratamiento de la COVID-19 del antiviral Interferón Alfa 2B recombinante (IFNrec), uno de los medicamentos usados actualmente en la lucha contra el nuevo coronavirus, para el que aún no existe una vacuna específica.
Ese fármaco se produce en la planta chino-cubana ChangHeber, instalada en la provincia de Jilin, y es uno de los productos creados por la industria biotecnológica de la Isla para el tratamiento de infecciones virales como las provocadas por el VIH, el virus del papiloma humano y las hepatitis tipos B y C.