Un primer grupo de médicos cubanos varados en Colombia luego de los últimos acuerdos migratorios entre Cuba y Estados Unidos, viajarán hoy hacia Miami en vuelo directo desde Bogotá.
Alrededor de veinte profesionales de la salud que habían abandonado sus misiones médicas fuera de la Isla y habían solicitado el Parole que entregaba el gobierno estadounidense, antes de su suspensión por la administración Obama el pasado 12 de enero.
Esta cifra podría incrementarse ya que, de acuerdo con Maikel Palacios, vocero de los médicos cubanos, “otro vuelo planificado para el viernes fue suspendido”.
Según lo comentado por Palacios a varios medios de prensa, decenas de visas han sido expedidas desde la eliminación del programa creado en 2006 por el entonces presidente George W. Bush. Aunque los acuerdos migratorios contemplaban su aplicación inmediata, el Departamento de Seguridad Interna (DHS) de los Estados Unidos anunció posteriormente que procesaría los casos pendientes de solicitudes de Parole.
Los médicos que ahora volarán a Miami llevaban varios meses en espera del visado necesario para entrar a territorio estadounidense. En el último año, el retraso en el procesamiento de las solicitudes incrementó la cifra de cubanos varados en Colombia hasta alcanzar unos 300, según estimados de los propios médicos.
“Los que presentaron la petición de visado el 3 de noviembre último ya cumplieron el término de tiempo mínimo establecido por el programa, 90 días, para que la embajada responda”, comentó Palacios. Pero desde antes, otros esperan por la respuesta oficial.
En más de una oportunidad, los profesionales de la salud de la Isla en Colombia se nolvadex-tamoxifen.net a favor de acelerar el proceso legal y de que fueran respondidas sus solicitudes.
A este grupo se une una veintena de médicos y técnicos de la salud que se encontraban en tránsito hacia suelo colombiano el día que fue tomada la disposición migratoria. Ellos han quedado un limbo legal, imposibilitados de solicitar visa para los Estados Unidos o de acogerse al programa de Parole.
Se estima que en sus diez años de existencia, más de 8 mil médicos y personal de la salud de Cuba llegaron a los Estados Unidos por esta vía, muchos de los cuales recibieron ayuda de organizaciones como Solidaridad sin Fronteras para revalidar sus títulos e integrarse en el sistema médico de ese país.
El otorgamiento del Parole a profesionales cubanos era considerada por el gobierno de la Isla como “un atentado contra las misiones médicas humanitarias y solidarias de Cuba en países del Tercer Mundo”. Que fuera eliminado por la administración Obama fue recibido como un “importante paso en el avance de las relaciones bilaterales”.
Este viernes el Ministerio de Salud Pública cubano insistió en su disposición de que los médicos y técnicos del sector que hayan abandonado sus misiones de colaboración puedan regresar a la Isla.
La nota, publicada en el periódico Granma, alude a la voluntad gubernamental para su reincorporación al Sistema Nacional de Salud, “como lo han venido haciendo desde el año 2014, de acuerdo con las regulaciones migratorias vigentes”.
La comunicación señala también que “la colaboración médica internacional que Cuba brinda tiene como principios la voluntariedad y la atención integral a las necesidades de los cooperantes dentro y fuera del país”, y cifra el número actual de colaboradores cubanos en unos 50 mil distribuidos en unos sesenta países.