El actual escenario económico cubano convida a nuevos actores. La búsqueda de eficiencia y competitividad trasciende las grandes empresas y los sectores tradicionales, para convocar a la iniciativa local de emprendimiento a que aporte manos a la obra. Por ese camino va Sambacuba, una cooperativa en formación dirigida hacia el área de los servicios recreativos, culturales, deportivos y de calidad de vida.
Su nombre se debe a una intención de acercamiento e intercambio con Brasil, explotando los atractivos de ese país y sus buenas relaciones con la Isla. El proyecto comprende una academia para la enseñanza de samba y rumba, un taller de capoeira, espacios para la moda, tradiciones y práctica del cricket.
Félix Durruthy, creador de la propuesta, explica que mientras transita la última fase de aprobación, aún queda por determinar dónde radicarán sus instalaciones. El centro recreativo José Antonio Echeverría y el círculo social Julio Antonio Mella resultan las opciones fundamentales, cuya infraestructura permitirá contar además con piscina, spa, un servi-café, terrenos de voleibol, tennis y fútbol.
Entretanto, la inserción de Sambacuba en el municipio Plaza o Playa, según su emplazamiento definitivo, prevé notables aportes al desarrollo local. Desde el punto de vista económico, pudiera articularse con las casas de renta cercanas, como otra oferta para los huéspedes. Asimismo, Durruthy opina que sería una variante de mucho interés para brasileños residentes o de visita en Cuba.
Completan los beneficios la generación de nuevos empleos y mayores ingresos, las debidas contribuciones financieras a la administración territorial, y el mejoramiento constructivo de la sede ocupada.
Los juegos típicos cubanos, la gimnasia aeróbica, la gastronomía y cocina tradicionales, ubican a la familia, sobre todo niños y ancianos, como usuarios meta del emprendimiento. De tal manera, estas posibilidades para emplear el tiempo libre vendrían a satisfacer una demanda latente en materia de ocio y recreación.
Otras prestaciones interesantes son los recorridos en bicicleta por sitios de importancia histórica y cultural en el barrio, acciones de educación ambiental y cuidado del entorno, masajes, exposiciones de arte, una sala de lectura, artesanía, un centro de información, y espacios para el audiovisual.
La futura cooperativa aspira a ofrecer un servicio personalizado, con estándares entre medio y alto. Estudios de factibilidad realizados por el equipo de Sambacuba indican que esta experiencia puede replicarse y adaptarse a otros municipios y provincias, incluso más allá, en el contexto latinoamericano. Durante una etapa más avanzada de la propuesta se espera exportar los servicios hacia Brasil, y posteriormente hacia otras naciones.
El gigante sudamericano y Cuba, países mestizos y bailadores, focos de la creación musical en el continente, poseen una empatía cultural que va desde las telenovelas y los carnavales, hasta el fútbol y las religiones de origen africano. En 2012 Brasil fue el sexto socio comercial de la Isla, y el segundo en América Latina; mientras actualmente es el principal inversionista en la Zona Especial de Desarrollo Mariel.
Estos factores, junto a la voluntad política de impulsar iniciativas locales y nuevas formas de gestión, constituyen, a juicio de Durruthy, un contexto de amplias oportunidades para Sambacuba.
La propuesta fue presentada en el pasado congreso de la Asociación Nacional de Economistas y Contadores de Cuba (ANEC), y en eventos convocados por la Sociedad Económica de Amigos del País, el Instituto de Antropología y la Casa de África. En estos momentos se gestionan la promoción y atracción de posibles socios e inversores, al tiempo que se establecen alianzas y relaciones solidarias con varias instituciones, como el Centro de Intercambio y Referencia de Iniciativas Comunitarias (CIERIC).