Cuba abrirá laboratorio para procesar pruebas de COVID-19 en Cayo Largo del Sur

El director de Salud Pública en la Isla de la Juventud, Israel Velázquez, explicó que la instalación ahorrará tiempo para detectar a las personas contagiadas y descartar a las sanas.

Cayo Largo del Sur, en el occidente de Cuba. Foto: ACN / Archivo.

Cayo Largo del Sur, en el occidente de Cuba. Foto: ACN / Archivo.

Cuba abrirá un laboratorio de biología molecular en Cayo Largo del Sur para ofrecer mayores garantías a los vacacionistas extranjeros que se hospeden en los hoteles de ese polo turístico, informo la Agencia Cubana de Noticias.

El director de Salud Pública en la Isla de la Juventud, Israel Velázquez, explicó que la instalación, con capacidad de análisis para las pruebas PCR a trabajadores y viajeros, ahorrará tiempo para detectar a las personas contagiadas con la COVID-19 y descartar a las sanas.

Cuba amplía red de laboratorios para detectar la COVID-19

Hasta ahora las muestras son procesadas en el Instituto de Medicina Tropical “Pedro Kourí” (IPK), de La Habana.

Los especialistas en microbiología y laboratoristas que trabajarán en la instalación de Cayo Largo recibieron el adiestramiento de procesos de laboratorio y protocolos de bioseguridad durante un mes, precisamente en el IPK.

La máxima autoridad sanitaria en el municipio especial detalló que el nuevo laboratorio estará en funcionamiento en noviembre próximo, a fin de que los vacacionistas disfruten en un destino seguro. 

Cuba ampliará su red de laboratorios de biología molecular con la construcción de nuevas instalaciones en las provincias de Matanzas, Holguín, Ciego de Ávila y el municipio especial Isla de La Juventud.

Turismo en Cuba, sin selfies en el Malecón

La disposición geográfica de los nuevos centros para realizar las pruebas a los sospechosos de estar contagiados con la COVID-19 coinciden con los principales polos turísticos de la Isla, que solo contaba con este tipo de instalaciones en La Habana, Villa Clara y Santiago de Cuba.  

El gobierno cubano dispuso un plan de reapertura de las operaciones de turismo internacional que, en su primera etapa, sólo permitirá a los visitantes foráneos hospedarse en hoteles ubicados en cayos, una especie de burbuja para evitar contagios.

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