Cuba: certificaciones de nacimiento, matrimonio y defunción no tendrán fecha de vencimiento

De acuerdo con una resolución del Ministerio de Justicia, la decisión se tomó basada en el hecho de que en los últimos años "se ha incrementado la solicitud y expedición de certificaciones", y a las "molestias, trámites innecesarios y demoras excesivas a la población en la solución, todavía engorrosa, de los procesos de subsanación de error".

Certificación de nacimiento en Cuba. Foto: @CubaMinjus / Twitter.

Certificación de nacimiento en Cuba. Foto: @CubaMinjus / Twitter.

Las certificaciones de nacimiento, matrimonio y defunción ya no tendrán fecha de vencimiento en Cuba, de acuerdo con una resolución del Ministerio de Justicia publicada este jueves en la Gaceta Oficial de la República de Cuba.

La Resolución 115 de 2020 deroga disposiciones anteriores que establecían un límite de curso legal para estos documentos, y basa la decisión en el hecho de que en los últimos años “se ha incrementado la solicitud y expedición de certificaciones”, y a las “molestias, trámites innecesarios y demoras excesivas a la población en la solución, todavía engorrosa, de los procesos de subsanación de error”.

Solo a la certificación de soltería mantuvo una vigencia de 180 días.

Además, la nueva norma informa sobre la eliminación de datos que hasta ahora aparecían en las certificaciones. Entre estos cambios se cuentan que la certificación de defunción no consignará el lugar de nacimiento ni el estado conyugal del fallecido, mientras que en la de matrimonio no aparecerán los apellidos de los padres de los contrayentes, refiere el sitio digital Cubadebate.

Otros datos necesarios en estos casos y anteriormente ya incluidos en las certificaciones, sí se mantienen. Entre estos están el título de la certificación, el tomo, folio y registro donde conste el asiento de inscripción, y la oficina registral que la expide, con expresión del municipio y la provincia a que pertenece, así como la fecha de la expedición del documento, los nombres y apellidos de la persona que lo confecciona y del que lo confronta, y los datos relacionados con el impuesto sobre el mismo.

Las demoras en los trámites y los pasos excesivos en su realización, son quejas sistemáticas de la población cubana, que debe enfrentar estos procesos burocráticos para muchas gestiones propias o familiares. Las autoridades de la Isla han llamado en varias ocasiones a simplificar estos procesos, pero en muchos casos continúa siendo un tema pendiente y una fuente de corrupción administrativa.

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