La Federación de Mujeres Cubanas (FMC) expresó la voluntad de brindar apoyo, acompañamiento y orientación a las víctimas de violencia de género a través de su red de casas de orientación a la mujer y la familia, y a la vez condenó estas manifestaciones, según la revista Mujeres, publicación oficial de la organización.
El citado texto aclara que la FMC “no juzga ni sanciona; educa y trabaja por una sociedad más justa”.
El pronunciamiento llega en medio de un encendido debate sobre la problemática, y que tomó más fuerza a raíz de la publicación en la revista independiente El Estornudo de un reportaje en el que cinco mujeres cubanas denunciaron los abusos sexuales a los que fueron sometidas por el trovador cubano Fernando Bécquer.
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La organización femenina ratificó que “en Cuba no existe, ni existirá tolerancia” para este tipo de comportamiento, y que corresponde a las víctimas y al sistema judicial “encausar el proceso legal con las pruebas suficientes hasta encontrar la verdad de tan lamentable suceso”.
Además, echa mano a lo que considera “ejemplos más palpables del sentir y la voluntad política del Estado Cubano para enfrentar la violencia contra las mujeres en toda su amplitud”: la Constitución de la República aprobada en 2019, el Decreto Presidencial 198 que contiene el Programa Nacional para el Adelanto de las Mujeres y el recién publicado Acuerdo 9231, del Consejo de Ministros, que contiene la Estrategia integral de prevención y atención a la Violencia de género y en el escenario familia.
Asimismo, la FMC recuerda que mientras se esclarecen por las vías correspondientes los hechos denunciados ahora y otros que pudieran aparecer, mantendrá “sus puertas abiertas a todas aquellas personas que siendo víctimas de violencia de género necesitan ser escuchadas y acompañadas en ese proceso”.
Recientemente trascendió que la multipremiada escritora cubana Elaine Vilar Madruga, quien tras la publicación de El Estornudo refirió en su perfil en Facebook que durante la adolescencia había sido víctima de Bécquer, había presentado una denuncia formal ante la Fiscalía de la República de Cuba, y que para ello había contado con apoyo y orientación institucional, en este caso de la Comisión de Género y Feminismo de la Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC).
Otras entidades, como el Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex) de Cuba, fijaron su posición de repudio a toda forma de violencia de género. En su comunicación, la entidad que organiza cada la año las jornadas contra la homofobia y transfobia en la Isla, instó a todas las víctimas a formular denuncias “siguiendo los procedimientos legalmente establecidos” para ello.