Cuba y Rusia, de los asteroides a la caña de azúcar

La Habana y Moscú llevan adelante un creciente número de proyectos conjuntos, como parte de la “alianza estratégica” que ambos países han venido estrechando en los últimos tiempos.

Refinería de Cienfuegos, centro de un futuro proyecto de colaboración entre Cuba y Rusia, según autoridades del país euroasiático. Foto: Otmaro Rodríguez.

Refinería de Cienfuegos, centro de un futuro proyecto de colaboración entre Cuba y Rusia, según autoridades del país euroasiático. Foto: Otmaro Rodríguez.

Cuba y Rusia llevan adelante un creciente número de proyectos conjuntos, como parte de la “alianza estratégica” que ambos países han venido estrechando en los últimos tiempos.

Entre los proyectos que unen a La Habana y Moscú, uno compete al campo de la astronomía e incluye una red de trabajo entre especialistas cubanos y observatorios rusos para el rastreo de objetos como meteoros, asteroides y basura espacial.

Esta colaboración comenzó en 2016 con nexos entre la Academia de Ciencias de Rusia; específicamente entre el Instituto Astronómico Estatal Shtérnberg de Moscú, el Instituto de Astronomía Aplicada, en San Petersburgo y el Observatorio Astrofísico Especial, según declaraciones a Sputnik de Omar Pons Rodríguez, director de Desarrollo Técnico del Instituto de Geofísica y Astronomía (IGA) del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA).

Uno de objetivos de esta colaboración es la construcción de una estación localizada de geodesia espacial, primera de su tipo en el Caribe. La misma comprende la instalación de una radio-antena de 13 metros de diámetro para la interferometría de muy larga, la ubicación de un sistema de rastreo de satélites por láser y de un receptor de sistema de posicionamiento por satélites.

Observatorio Nacional Astronómico

Como concreción de esta asistencia, el Instituto de Geofísica y Astronomía inauguró ya un Observatorio en 2022. Pero, el trabajo prevé la instalación de dos telescopios ópticos; la renovación de la Estación Radioastronómica Solar de La Habana, creada para el seguimiento de la actividad del sol y su influencia en la Tierra.

La colocación de toda esa tecnología se incluye en lo que Pons Rodríguez califica como el “gran sueño de la constitución Observatorio Nacional Astronómico” en Valle de Picadura, Mayabeque, lo cual es una “prioridades dentro de la colaboración bilateral”.

Investigaciones conjuntas

El especialista del IGA Francisco González Veitía precisó a Sputnik que las investigaciones realizadas en el Observatorio Cubano-Ruso tienen gran importacua para ambos países.

Entre los temas de estudio a partir de esta colaboración se encuentran las estrellas variables manchadas y a otras exploraciones en torno a los asteroides cercanos a la Tierra.

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González Veitía recordó que desde la década de 1960 la extinta Unión Soviética colaboraba con la isla en el campo de la astronomía.

“Existieron cooperaciones relevantes en la esfera de la radioastronomía. Incluso los radiotelescopios que hoy operan en la Estación Radioastronómica de La Habana fueron colocados en aquella época y esa institución funcionó durante muchos años gracias al apoyo soviético. Por ello, los actuales lazos con Moscú no nos resultan ajenos, somos amigos y algunos ya nos conocemos”, comentó el experto.

También indicó que el financiamiento del país euroasiático resultó esencial en la ejecución de esos proyectos y adquisición de sistemas altamente costosos, ya que Cuba atraviesa una severa crisis económica, agudizada por los efectos de la pandemia y de las sanciones de Estados Unidos.

Acercamiento en 2023

Cuba y Rusia han impulsado su relación bilateral en los últimos años. En la actualidad, la nación eurasiática es uno de los diez primeros socios comerciales de Cuba, y ambos gobiernos definen su asociación como “estratégica”.

De hecho, la semana pasada el embajador ruso en La Habana, Víctor Koronelli, reveló que el suministro de nuevos automóviles, la renovación de la red ferroviaria y la modernización de la mayor refinería de petróleo en Cuba son algunos de los proyectos bilaterales considerados entre la isla y Rusia en estos momentos.

El diplomático se refirió a la participación en la refinería de Cienfuegos, situada a unos 250 km al sureste de La Habana. Es la más grande del país y es propiedad de la empresa estatal Cupet.

“Actualmente hay discusiones sobre la posible reconstrucción, total o parcialmente, no lo sé, pero el tema también se está discutiendo”, dijo Koronelli a la agencia TASS.

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Según el diplomático, las empresas rusas también suministran equipos para programas metalúrgicos, así como para centrales térmicas.

Ladas, ferrocarriles y azúcar

Los fabricantes de automóviles rusos también están interesados ​​en entregar automóviles a Cuba, y se negocian los respectivos suministros. “Nuestro equipo aquí es demandado como la gente lo recuerda”, dijo Koronelli, quien mencionó marcas como Lada Vesta, Granta, Niva, así como Kamaz, entre los modelos populares en el país.

Junto a esto, y en materia de transporte, Russian Railways está negociando la reconstrucción de una sección de los ferrocarriles cubanos, según el diplomático, quien agregó que Sinara-Transport Machines puede suministrar material rodante a los ferrocarriles cubanos.

RZD International, subsidiaria de Russian Railways, y la Unión de Ferrocarriles de Cuba firmaron un acuerdo contractual sobre el proyecto de restauración y modernización de la infraestructura ferroviaria de la república en 2017.

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Del mismo modo, Rusia puede participar en la reconstrucción de plantaciones de caña de azúcar y plantas que la procesan en Cuba, dijo a TASS Koronelli, quien agregó que dos compañías agrícolas rusas están discutiendo proyectos respectivos en Cuba.

“Ahora nuestras empresas planean venir aquí, incluso al sector azucarero. Hasta el momento todo está en etapa de discusión. Sin embargo, el tema es de dos grandes holdings agropecuarios interesados ​​en trabajar aquí en la reconstrucción de plantaciones de caña de azúcar y plantas procesadoras”, concluyó el diplomático.

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