Díaz-Canel: “Cuba no está paralizada” pese a “situación energética”

Un día después de informar públicamente sobre el desabastecimiento de combustible que sufre el país, el mandatario aseguró que “hay dificultades, pero no hay alarma”.

Foto: Presidencia de la República/Twitter.

El presidente cubano Miguel Díaz-Canel aseguró que Cuba “no está paralizada” a pesar de la crisis energética “coyuntural” que atraviesa la Isla en estos momentos y que ha obligado a tomar “medidas de ajuste” en diversos sectores de su economía.

Un día después de informar públicamente sobre el desabastecimiento de combustible que sufre el país, el mandatario aseguró que “hay dificultades, pero no hay alarma” en una nueva comparecencia en el espacio televisivo Mesa Redonda junto a varios ministros de su gabinete.

Díaz-Canel reiteró que la “situación energética” actual es resultado del “cerco criminal” de los Estados Unidos, el cual busca “asfixiar” a la Isla evitando la entrada de petróleo, y aseveró que su gobierno ha trabajado “intensamente y con antelación” para enfrentar esas “contingencias”.

“Nadie ha pensado en medidas extremas”, dijo desmintiendo rumores que circulan en la Isla sobre el comienzo de un nuevo Período Especial y que atribuyó a “bolas”, que en su criterio son “parte del instrumental de nuestros enemigos”.

Por su parte, el ministro de Economía, Alejandro Gil, explicó que las medidas tomadas, y que fueron presentadas este jueves en una reunión del Consejo de Ministros, “buscan garantizar la vitalidad de los servicios básicos a la población y los principales sectores de la economía”.

Gil reconoció que, aunque para el próximo 14 de septiembre se espera la llegada de un barco de crudo al país, este no será suficiente para “mantener la normalidad” y por ello es necesario “reducir algunos niveles de actividad” en la producción y los servicios fundamentales, aunque todos “seguirán funcionando”.

De acuerdo con el titular, el diesel existente se priorizará para actividades como la distribución y producción de alimentos, los servicios básicos a la población, “un nivel” de transporte público, la “vitalidad “de salud y educación, y el respaldo a “las demandas del turismo”.

En cambio, explicó que será necesario “disminuir” producciones como las de acero y cemento, así como algunas que requieren de “un gasto energético alto”. También adelantó afectaciones “temporales” en la siembra en la campaña de frío, pero dijo que se trabajaría luego para recuperarlas.

Gil reiteró que se trata de una situación “coyuntural”, pero advirtió que Cuba podría tener “otros eventos de escasez en el transcurso de este año o en el otro” y dijo que el gobierno cubano se está “preparando para eso”.

Afirmó que la Isla no está en la misma situación del Período Especial, la severa crisis económica que sufrió la Isla en los años 90, pero dijo que “los retos pueden arreciarse”, y que las medidas que se tomen deben “anticiparse” a esos retos para minimizar su impacto y “disminuir el componente energético de la economía”.

“Nuestra economía está hoy mucho más diversificada. No vamos a perder de golpe y porrazo el 80% del comercio exterior como sucedió en el Período Especial”, dijo y confirmó que el gobierno «no renuncia» a las metas de crecimiento del Producto Interno Bruto previstas para este año.

Explicó que además que en el Consejo de Ministros fueron evaluadas las distintas actividades económicas para decidir en qué áreas priorizar, pero sin afectarlo todo, para lo cual se había trazado una estrategia. Y subrayó: “El país no esta paralizado, los servicios fundamentales van a estar funcionando”.

Por su parte, el ministro de Energía y Minas, Raúl García Barreiro, dijo que como resultado del bloqueo hubo dificultades con el gas licuado, lo cual condujo a tomar medidas para tratar de minimizar su impacto sobre la población.

“Podemos asegurar que el suministro a la población está garantizado, tanto el normado como el liberado”, dijo.

También se refirió al tema de la generación alternativa de energía eléctrica, incluso con inversión extranjera en el caso de la solar fotovoltaica, así como la bioeléctrica a partir de un proyecto que se viene desarrollando en el central “Ciro Redondo”, de Ciego de Ávila. Y aseguró que, de momento, no estaban planificados cortes –los llamados «apagones»–, pero que de ser necesarios se informaría «oportunamente» spbre su programación.

En cuanto a la gasolina, el ministro dijo que se habían presentado problemas ya conocidos por la población, pero añadiendo que a fines de este mes el país ya tenía garantizado el suministro, tanto para el sector privado como para el estatal.

«Reajustando» el transporte

En lo referido al transporte, uno de los sectores que sufre un mayor impacto por el déficit de combustible, el ministro Eduardo Rodríguez precisó que existe un “plan estructurado” para la “implementación” de las medidas, como parte del cual están “debidamente aseguradas las transportaciones principales” de cargas en la Isla, con especial prioridad a los alimentos.

Sobre el transporte urbano, uno de los temas más sensibles para los cubanos, Rodríguez dijo que se priorizan los sitios de mayor concentración de personas y los llamados “horarios picos” de la mañana y la tarde, al tiempo que se ha incrementado la presencia de inspectores y de la policía para “persuadir” a los choferes estatales de transportar a quienes están en las paradas.

Reconoció una reducción en los viajes y número de pasajeros que se transportan actualmente en la Isla, principalmente en la capital, donde los ómnibus estatales han pasado de mover más de 1 millón de pasajeros por día a alrededor de 600 mil en la actualidad.

Sobre la transportación nacional de pasajeros, el titular explicó que se realizó un “reajuste” que implica “desplazamientos de horarios” y que a partir del próximo domingo solo habrá una salida diaria del ferrocarril entre La Habana y el oriente del país, y también una sola en dirección contraria.

Mientras, un grupo de viajes en ómnibus nacionales sufrirán “cancelaciones” mientras se mantenga el desabastecimiento, lo que conducirá a una reducción del número de viajes, y a dar prioridad a una única salida diaria entre la capital y las principales ciudades de la Isla.

Explicó que en cada provincia se especificarán los “ajustes” aplicados y pidió a las personas a “posponer los viajes que no sean imprescindibles”, al tiempo que a quienes ya hicieron reservas los exhortó a consultar a la empresa de ómnibus acerca de sus viajes y las posibles “alternativas de transportación” en caso de ser cancelados.

Salir de la versión móvil