Meliá apuesta por una rápida recuperación del turismo en Cuba

La famosa cadena hotelera española cuenta con 39 hoteles en diez destinos diferentes dentro del archipiélago

Hotel Sol Palmeras, en Varadero

La cadena española Meliá Hotels International tiene puestas sus mayores esperanzas en una rápida recuperación del turismo en Cuba tras la debacle ocasionada por la pandemia de Covid-19 en el sector turístico y la industria de los viajes a nivel mundial.

El director ejecutivo de la cadena, Gabriel Escarrer, declaró esta semana que la condición insular de Cuba ofrece más posibilidades de control epidemiológico, informó Prensa Latina.

Escarrer aseguró que la Isla podrá posicionarse nuevamente como un destino seguro, una vez que la pandemia permita retomar el turismo internacional, y en un contexto en que lo importante será “vender seguridad, sumado a lo espectacular de sus parajes”.

En medio de ese panorama, Meliá celebró este domingo, 10 de mayo, tres décadas de la fundación del Hotel Sol Palmeras, primera instalación de alojamiento gestionada por la cadena en Cuba, donde cuenta ya con 39 hoteles en diez destinos diferentes dentro del archipiélago.

Ese resort vacacional de categoría 4 estrellas está situado en el blaneario de Varadero y opera bajo la modalidad todo incluido; destaca por su magnífica ubicación cerca del Club de Golf y el Centro de Convenciones Plaza América, en la primera línea de una de las playas más reconocidas por turistas en todo el mundo, resalta un comunicado divulgado por Meliá.

Inaugurada en 1990 por Fidel Castro y Gabriel Escarrer, la instalación marcó un antes y un después para el turismo en la Isla, justo cuando Cuba se abría definitivamente al mercado turístico global.

Durante sus treinta años de trabajo ininterrumpido, el Sol Palmeras se ha convertido en un referente del sector turístico en la Isla, y uno de los hoteles emplazados en Varadero que mayores ingresos genera.

De acuerdo con el comunicado, los trabajadores de esa instalación “se empeñan cada día, con su trabajo y su esfuerzo, en concebir una gran casa para cada cliente; en mostrarle a cada huésped el verdadero tesoro de Cuba: la alegría de su gente, la riqueza de su cultura y de sus valores como sociedad”.

“Muchos son los retos que depara el futuro, pero sin dudas la tenacidad y la entrega de quienes laboran en esta instalación, nos llenan de optimismo y satisfacción por lo que hemos logrado y por las nuevas metas de Meliá Hotels International en la isla grande del Caribe”, concluye.

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