El cumpleaños del peso convertible

El peso convertible cubano cumple este 20 de diciembre 19 años en circulación. Este, tal vez, sea su último cumpleaños.

CUC (por sus siglas en inglés de Cuban Convertible) nació por decreto  de Héctor Rodríguez Llompart, quien fuera Ministro-Presidente del ahora extinto Banco Nacional de Cuba. Su certificado de nacimiento fue la resolución  357 de esa institución. Era el invierno de 1994 y los cubanos dejaban atrás uno de los peores años de la crisis bautizada como el Período Especial.

Como moneda, su misión era “ser utilizado en las transacciones comerciales que se realizan en los establecimientos debidamente autorizados a operar en moneda libremente convertible” y servir “para el pago que deben ejecutar las entidades autorizadas por el Gobierno para aplicar el sistema de estimulación en efectivo en moneda libremente convertible a sus trabajadores.”

El peso convertible tuvo una “infancia marginal”. Ni siquiera poseía un diseño original en los reversos de cada uno de sus billetes. Durante una década, circularon con la misma imagen repetida en  una de sus caras: el escudo nacional cubano.

A punto de cumplir los diez años, otra resolución del Banco Central de Cuba  determinó  la sustitución de todos los dólares estadounidense por pesos convertibles: una decisión que cambió el criterio que la población cubana tenía del otro peso.

Pocos meses después, llegó otra noticia que trastornaría sus valores: CUC valía más que el propio dólar. El peso convertible entró en el mismo club de monedas más apreciadas que la divisa estadounidense, donde se encontraban el confiable franco suizo y la ancestral libra esterlina.

Pero los tiempos cambiaron. Al peso convertible, lo están preparando para dejar este mundo, víctima de  un infarto monetario fulminante. Su muerte será repentina; su nota necrológica aparecerá en todos periódicos en Cuba y será leída por radio y televisión. Ese día, no habrán otras noticias.

El ataúd del CUC será cargado de un número indeterminado de pesos cubanos. La gente quiere que sean menos de veinticuatro…mientras menos, mejor.

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