Invierno lluvioso, sobre todo en el occidente y centro de Cuba. Ya lo habíamos dicho. Y después de las temperaturas veraniegas de noviembre y diciembre, ahora al fin llegó el frío, acompañado de lluvias e inundaciones costeras, como ocurrió el pasado fin de semana y muy probable que vuelva a ocurrir algo parecido en el presente fin de semana, quizás hasta un poco más fuerte.
Y en medio de todo esto, un huracán que tuvo por nombre Alex en el norte del Atlántico la semana pasada. De hecho, es nominalmente el primer ciclón tropical de la Temporada de Huracanes del 2016, aunque falte aún tiempo para que llegue el primero de junio. No es la primera vez que ocurre. Ha habido con este, cuatro casos desde 1886.
El más memorable resultó el huracán Alice de 1955. Surgió como ciclón tropical en diciembre de 1954 en el Atlántico, al nordeste de las Antillas Menores, con trayectoria al suroeste. El primero de enero de 1955 recibió su nombre como el primero de la lista de la Temporada de Huracanes de 1955. Azotó con categoría de huracán a la porción norte de las Antillas Menores. Fue también un ciclón tropical que ocurrió en dos años, en 1954 cuando se inició, y en 1955 cuando azotó a las Antillas Menores.
Este fin de semana
Hace poco les explicaba en un artículo aquí en OnCuba que la circulación global en el hemisferio norte tenía una gran relación con la lluvia y los fenómenos severos, como inundaciones costeras y tormentas, máxime en un año de un Niño fuerte, y también en que nos llegue el aire frío de nuestro invierno.
Desde diciembre pasado, la circulación global ha cambiado. En ese mes predominó el calor, y casi como en verano, con relativamente poca lluvia. Ahora la circulación global ha pasado de la fase de “alto índice de circulación”, o en otras palabras un flujo oeste-este de vientos fuertes a alturas de 10 a 12 kilómetros, a la fase de “bajó índice de circulación”, que para los meteorólogos quiere decir que hay ondas llamadas polares, con intercambio de aire frío y cálido (frío con el flujo de aire norte-sur al oeste del eje de la onda, y cálido con el aire que viaja de sur a norte, al este del eje de la onda, hacia latitudes más altas del Atlántico.)
En esa ondulación, u Onda Polar, se producen de esta manera intercambio entre las zonas polares y el trópico, y entonces en Cuba, cuando está situada al oeste de la onda, bajan las temperaturas, se producen situaciones muy lluviosas, con vientos fuertes del noroeste, que producen inundaciones costeras en la costa norte occidental, principalmente, aunque pueden ocurrir en la costa norte central. Esta situación es totalmente típica de un evento El Niño fuerte durante los meses de enero, febrero y marzo, por lo que pueden repetirse con mayor o menor intensidad en este trimestre.
De hecho, se prevén una serie de fenómenos que, sin poder tenerse en este momento una seguridad plena de que ocurran –este texto lo escribo el jueves 21– pueden perfectamente ocurrir este fin de semana, y quizás hasta con un poco más de intensidad que el fin de semana anterior.
https://www.youtube.com/watch?v=RhLm0iRWsME
Estas imágenes fueron filmadas por el CEO de OnCuba, Hugo Cancio, el domingo 17 de enero de 2016, en la esquina de 1era y B, en el Vedado habanero
¿Cuáles serán los procesos atmosféricos que ocurrirán en los próximos días?
La lógica de los procesos sería la siguiente: una vaguada prefrontal se generará en la noche de jueves para viernes por delante de un frente que avanza por el golfo de México; las lluvias afectarán sobre todo desde la madrugada y todo el día viernes, y pueden ser fuertes en cualquier momento. El frente en sí, llegará al final de la tarde de mañana viernes 22 al occidente del País, continuando con las lluvias. Por detrás del frente se generarán en el golfo vientos fuertes con 60-65 km/h, que soplarán de dirección entre el noroeste y el norte, arrastrando trenes de olas hacia el occidente de Cuba. Estas olas, batiendo el litoral norte occidental desde la noche del viernes hasta el sábado 23, podrán entonces provocar inundaciones costeras en las zonas más bajas del litoral norte occidental, incluyendo el Malecón habanero. Esa es una posibilidad real, a la cual pienso que hay que prestar atención para, sí ocurre, estar lo más preparados posibles. Para sábado 23 y sobre todo el domingo 24 y lunes 25, FRÍO, marcadas condiciones invernales con descenso notable de las temperaturas, debido al aire frío que nos llegará del continente norteamericano…. ¡Al fin llegó el invierno a Cuba! ¡Y a sacar de verdad los abrigos!
Por cierto, creo que vale la pena en esta ocasión decir una vez más que la frase “penetración del mar” es totalmente incorrecta. Se usó en Cuba como “invento cubano” (que a alguien infelizmente se le ocurrió por los años 80 del pasado siglo). Se hacen ahora ingentes esfuerzos por erradicar esta frase y establecer la que está internacionalmente reconocida en el vocabulario oficial de la Organización Meteorológica Mundial. Es la frase castellana “inundación costera” –en inglés “coastal flooding” para los EE.UU. o “coastal inondation” para el Reino Unido y Australia. No puede confundirse con la inundación por lluvia, por ser costera y siempre debe mencionarse junto a las marejadas.
La frase “penetración del mar” es un disparate: supongamos que Ud. está de pie frente al hotel Riviera y el agua le llega por sus rodillas. ¿Dónde está Ud? ¿En el mar? ¿O simplemente está parado en la calle Paseo frente al hotel Riviera, área que ha sido inundada por el agua de mar? Evidentemente es así; el mar no se ha movido de su lugar, por lo que no ha penetrado; Ud NO está parado en el mar, sino sigue de pie frente al hotel Riviera. Lo que ha ocurrido es que el agua del mar, al saltar el muro, ha inundado la zona del malecón.
Pero “El Niño” ya pasó por su intensidad máxima
Tal como lo leen. A pesar de que “El Niño” está ahí presente como un evento fuerte, y continuará así durante los próximos meses, ya su pico máximo de intensidad pasó, ahora transcurrirá su vida con un decrecimiento gradual en su intensidad.
Esto es lo que sugieren varios indicadores en las últimas semanas. El actual evento clasifica como uno de los tres eventos más fuertes en los últimos 50 años, y hay indicios para pensar que en realidad ha sido el más fuerte conocido.
La temperatura de la superficie del mar y en la capa subyacente del océano en el centro y este del océano Pacífico ecuatorial se ha ido enfriando en las últimas semanas, aunque se mantiene como un evento “El Niño” fuerte. En la componente atmosférica del evento, el llamado Índice de Oscilación del Sur, uno de los más consistentes, ha bajado hasta los valores que tendría un Niño débil (pero ésta es sólo una de las componentes).
Los eventos El Niño, Neutro o La Niña (ENOS) para los próximos meses
Los modelos climáticos indican que el evento El Niño 2015-2016 irá debilitándose en los próximos meses hasta alcanzarse al menos condiciones neutras desde el segundo trimestre del 2016.
El consenso de modelos climáticos del CPC/IRI para el trimestre Agosto-Septiembre-Octubre, que son los meses principales en cuanto a la formación de huracanes en el Atlántico, indica que con probabilidades mayores que el 40{bb302c39ef77509544c7d3ea992cb94710211e0fa5985a4a3940706d9b0380de}, pudiera tenerse un evento Neutro (46{bb302c39ef77509544c7d3ea992cb94710211e0fa5985a4a3940706d9b0380de}) o La Niña (40{bb302c39ef77509544c7d3ea992cb94710211e0fa5985a4a3940706d9b0380de}).
Las estadísticas de lo que realmente ha ocurrido desde el año 1900, un siglo y 15 años de datos, sugieren algo parecido. En el lapso mencionado, se contabilizaron 26 eventos El Niño. El 50{bb302c39ef77509544c7d3ea992cb94710211e0fa5985a4a3940706d9b0380de} de ellos fue seguido por un año Neutro y el 40{bb302c39ef77509544c7d3ea992cb94710211e0fa5985a4a3940706d9b0380de} fue seguido por un evento La Niña.
De cumplirse este pronóstico, entonces la Temporada de Huracanes del 2016 podría ser una temporada activa, tanto si estuviera bajo un evento Neutro como, y todavía con una mayor probabilidad, si hubiera un evento La Niña, lo que tendría que, por supuesto, ser puntualizado más avanzado el año.
Respecto al importante asunto del comportamiento de la lluvia en Cuba, la situación podría ser favorable. Al no existir El Niño en el verano, no existirían tampoco las condiciones generales para la inhibición de la lluvia veraniega. Por lo que, tanto en condiciones de un evento Neutro como de un evento La Niña, el comportamiento de la lluvia sería más favorable para Cuba, pudiendo esperarse acumulados en la norma o por encima de la norma, según sea el caso y teniendo en cuenta otras condiciones generales. Por ejemplo, una mayor actividad en la Temporada de Huracanes podría traer consigo más Ondas Tropicales y organismos ciclónicos débiles que sean beneficiosos en este aspecto. No hay que pensar sólo en los huracanes, que sí son temibles.