El príncipe Carlos parte de La Habana tras una histórica visita

El Airbus Voyager A330-200 de la Fuerza Real Británica partió sobre las 16.00 hora local del aeropuerto José Martí rumbo a Islas Caimán.

El príncipe Carlos de Inglaterra y su esposa suben al avión oficial en el aeropuerto internacional José Martí de La Habana, al concluir su visita de cuatro días. Foto: Ernesto Mastrascusa / EFE.

El heredero de la corona de Reino Unido, el príncipe Carlos de Gales, y su esposa Camila, duquesa de Cornualles, abandonaron este miércoles La Habana tras una histórica visita de tres días que ha supuesto la primera estancia oficial en Cuba de un miembro de la realeza británica.

El Airbus Voyager A330-200 de la Fuerza Real Británica partió sobre las 16.00 hora local (20.00 GMT) del aeropuerto José Martí de la capital cubana rumbo a Islas Caimán, la última etapa de una extensa gira por el Caribe de la pareja real que ha recorrido Santa Lucía, Barbados, San Vicente y las Granadinas, San Cristóbal y Nieves y Granada.

Carlos de Inglaterra (c), acompañado por la viceministra cubana de Relaciones Exteriores, Ana Teresita González (i), camina por la pista del aeropuerto internacional José Martí de La habana, al concluir su visita de cuatro días este miércoles. Foto: Ernesto Mastrascusa / EFE.

La pareja fue despedida en la pista del aeródromo por la viceministra de Exteriores cubana, Ana Teresita González Fraga, la misma autoridad que los recibió a su llegada a Cuba la tarde del domingo.

La visita real, orientada a profundizar en la “diplomacia constructiva” del Reino Unido aunque carente de contenido político, incluyó una reunión el lunes entre el príncipe de Gales y el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel.

En el encuentro ambos evaluaron positivamente el estado de las relaciones bilaterales y mencionaron la voluntad mutua de desarrollar los vínculos en áreas como la educación, la salud, la cultura, la protección del medioambiente y el desarrollo sostenible, según medios estatales cubanos.

Foto: EFE.

El príncipe de Gales y la duquesa de Cornualles también participaron en una actividad cultural en el parque John Lennon de La Habana y en la ceremonia de inicio de la construcción de un parque fotovoltaico de financiación británica en la Zona Especial de Desarrollo del Mariel, el proyecto estrella del Gobierno cubano para captar capital extranjero.

En sus últimas horas en La Habana, el heredero de la corona británica recorrió varios laboratorios de investigación y desarrollo del Centro de Inmunología Molecular, inaugurado en 1994 por Fidel Castro.

Tras la visita a este espacio se unió a su esposa en el restaurante privado “Habanera”, en Miramar, donde ambos degustaron bebidas típicas como el “mojito” y varios platos de la cocina tradicional cubana.

La histórica visita a Cuba de la pareja real británica se enmarca en el estrechamiento de vínculos iniciado en 2016 con el viaje del entonces ministro de Exteriores y actual ministro de Hacienda del Reino Unido, Philip Hammond, al calor del “deshielo” entre Estados Unidos y Cuba, revertido en los últimos tiempos por la Administración de Donald Trump.

Salir de la versión móvil