Una empresa estatal cubana prevé fabricar 6.270 bicicletas mecánicas como alternativa ante la crisis de transporte que atraviesa la Isla actualmente, debido a la escasez de combustible.
Las bicicletas, fabricadas por la empresa industrial Ángel Villarreal Bravo (Ciclos Minerva), de Villa Clara, tendrán un destino social, con preferencia para las universidades, de acuerdo con Madeleine Vargas, directora de la Empresa Industrial de Equipos y Servicios Asociados (EIESA), citada por el periódico provincial Vanguardia..
Con financiamiento del presupuesto del Estado ya se producen “las primeras mil y debemos continuar con el resto del lote a partir de junio. Aquí fabricamos las partes metálicas (cuadro y tenedor) e importamos los demás componentes desde China”, precisó, por su parte, el director adjunto de Ciclos Minerva, David Rodríguez.
El directivo reconoce que la cantidad inicial resulta insuficiente “en un mercado desabastecido durante años”, pero espera que esta cifra pueda crecer tanto a través del financiamiento estatal como a la capacidad de autogestión de la propia empresa.
La empresa está preparada para administrar por su cuenta la liquidez que genere este producto, con una parte de los ingresos previsto para las inversiones, sustitución de equipamiento, compra de materia prima y otros gastos necesarios para que no se detenga el ciclo productivo, y de esa forma lograr también la captación de divisas. Mientras, con la otra parte comenzó a comprar insumos para producir las bicicletas mecánicas, las cuales se comercializarán en pesos cubanos, indica la fuente.
Regresan las bicicletas Minerva a las calles cubanas https://t.co/0g5lQcSXjz a través de @VanguardiaCuba
— Vanguardia de Cuba (@VanguardiaCuba) May 29, 2021
Además, la entidad villaclareña ha diversificado sus producciones, entre las que ahora se cuentan estantes de almacén para empresas del sector turístico, y puertas de cinc que tributan al Programa Nacional de la Vivienda.
De igual forma, fabrican triciclos eléctricos con “un alto grado de integración”, al producirse buena parte del equipo en la industria nacional. Para el ciclo anual de 1.800 ciclos es “prioridad” adquirir piezas en mercados nacionales a precios inferiores, aseguró el directivo.
De acuerdo con Rodríguez, “la fábrica de componentes electrónicos de Pinar del Río hace cajas eléctricas y cargadores, y está ejecutando una inversión para fabricar baterías. También estamos buscando la posibilidad de comprar en el país todos los metales que necesitamos”.
“En el caso de los ciclomotores eléctricos, antes nos limitábamos a ensamblarlos; pero ya empezamos a comprar el tubo para hacer el cuadro aquí, sustituir otra importación y ahorrar divisas”, concluyó.