Gobierno cubano lanza operación contra “coleros, acaparadores y revendedores”

Como parte de un plan nacional de enfrentamiento a ilegalidades, delitos y hechos de corrupción “se identificaron 2 979 establecimientos comerciales”, en los que se concentran ese tipo de violaciones, dijo este martes el primer ministro cubano, Manuel Marrero.

Colas para comprar alimentos en La Habana. Foto: Otmaro Rodríguez

Colas para comprar alimentos en La Habana. Foto: Otmaro Rodríguez

Cuba destinará 22 281 personas a enfrentar la especulación relacionada con una cadena que implica a los llamados coleros, acaparadores y revendedores de productos que se ofertan en tiendas y farmacias en toda la Isla, informaron medios estatales.

Como parte de un plan nacional de enfrentamiento a ilegalidades, delitos y hechos de corrupción “se identificaron 2 979 establecimientos comerciales”, en los que se concentran ese tipo de violaciones, dijo este martes el primer ministro cubano, Manuel Marrero, en el programa televisivo Mesa Redonda.  

De acuerdo con Marrero, “las ilegalidades toman diferentes formas, una de ellas es lo que está ocurriendo en las colas, las cuales existían incluso antes de la COVID-19 y es consecuencia del contexto actual, pero lo que no puede ocurrir es que se convierta en un elemento de riesgo o escenario de actividades económicas ilícitas”.

Explicó que los coleros están relacionados con acaparadores que “contratan personas, se ponen en contacto con trabajadores de los establecimientos, alquilan espacios para crear almacenes ocultos, y luego venden en las redes sociales con total impunidad y precios excesivos”.

Las largas filas han sido habituales en Cuba durante la crisis sanitaria provocada por la COVID-19, que llegó cuando la Isla estaba en plena crisis económica, caracterizada por la escasez y desabastecimiento de productos de primera necesidad en las tiendas que venden sus mercancías en divisas.

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“Los primeros que hemos reconocido que hay desabastecimiento somos nosotros como Gobierno y, en medio de esta situación, estamos tratando de dar un poquito más”, dijo el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, en un discurso transmitido en el programa televisivo.

Citado por Cubadebate, el mandatario expresó que “el desabastecimiento no puede ser la causa para que haya ilegalidad, ese es un planteamiento deshonesto”.

Díaz-Canel insistió que “nunca se actuará motivados por el odio o sembrándolo”, aunque calificó como “pillos” a los que se dedican a esas actividades que llamó “actuar parásito”, “gente que en su mayoría no trabaja, no aporta socialmente nada a la población ni al país; que se aprovecha de nuestros problemas económicos para enriquecerse a costa de los demás, limitando el acceso de nuestra población a las cosas que tenemos en las actuales condiciones”. 

Manuel Marrero informó que más de 1.300 personas han sido enfrentadas por estas actividades ilícitas y se han aplicado muchas medidas, desde profilácticas hasta penales. Detalló que 280 ciudadanos, por su reincidencia, han sido procesados penalmente.

El primer ministro se refirió a orientaciones recibidas de Raúl Castro, quien ordenó aconsejar y persuadir a las personas que se dedican a esas actividades, “pero ante la falta de respeto actuar con energía: detener, perseguir y poner a disposición de los tribunales”. 

El plan de enfrentamiento fue aprobado el pasado viernes en el Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros, e involucra a fuerzas de la policía y el ejército cubano, así como representantes de las organizaciones políticas y de masa.

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