La Habana: cierran grandes centros comerciales por casos de coronavirus

La situación de las tiendas de Carlos III y Cuatro Caminos no es una excepción en el actual escenario epidemiológico de la ciudad, que atraviesa un complejo rebrote de la COVID-19. Durante el mismo, instituciones y entidades estatales, incluyendo varias de Salud Pública, se han convertido en foco de propagación de la enfermedad, según reconocieron las propias autoridades habaneras.

Personas caminan por los alrededores de la tienda Carlos III, en La Habana. Foto: Otmaro Rodríguez / Archivo.

Personas caminan por los alrededores de la tienda Carlos III, en La Habana. Foto: Otmaro Rodríguez / Archivo.

Los centros comerciales de Carlos III y Cuatro Caminos, dos de los más grandes de La Habana, fueron cerrados “al reportarse casos positivos a la COVID-19 entre su personal”, según informaron autoridades sanitarias. 

La doctora Yadira Olivera Nodarse, directora del Centro Provincial de Higiene, Epidemiología y Microbiología, confirmó el cierre de ambos centros en la reunión de este jueves del Consejo de Defensa de la capital cubana. En el encuentro, la directiva explicó que “en estos momentos se realiza la desinfección de los complejos de tiendas y se estudia el universo epidemiológico para llegar a todos los contactos”, reseña Tribuna de La Habana.

Carlos III y Cuatro Caminos son dos de los más importantes y concurridos establecimientos de su tipo en la urbe habanera, que actualmente comercializan un grupo de productos en moneda libremente convertible (MLC) y otros, principalmente alimentos, en pesos cubanos. Con anterioridad, ya habían debido cerrar temporalmente durante la pandemia tras registrarse contagios con el coronavirus SARS-CoV-2 entre sus trabajadores. 

La situación de estos centros no es una excepción en el actual escenario epidemiológico de la ciudad, que atraviesa un complejo rebrote de la COVID-19. Durante el mismo, instituciones y entidades estatales, incluyendo varias de Salud Pública, se han convertido en foco de propagación de la enfermedad.

Así lo reconocieron hoy las autoridades habaneras durante la reunión del Consejo de Defensa Provincial (CDP). Su presidente, Luis Antonio Torres Iríbar, “exigió a las instituciones extremar las medidas sanitarias para evitar el surgimiento de focos y eventos epidemiológicos que después se extienden a la doxycycline-info.net” y “señaló un grupo de deficiencias en la aplicación de los protocolos sanitarios en las entidades“, lo que, advirtió, tensa las capacidades del sistema sanitario en los municipios, apunta Tribuna.

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Por su parte, la doctora Olivera Nodarse explicó que “un número considerable de incidencias epidemiológicas se han originado en las fábricas y otros centros de producción, las obras de la construcción, donde se concentran gran número de obreros, y las entidades que ofrecen servicios al público como los bancos, que además funcionan en ambientes climatizados”.

La directiva informó que este miércoles se abrieron focos en dos fincas del municipio de Cotorro, “por lo que se realiza una intensa pesquisa en el resto”, al tiempo que se cerró un evento de transmisión que se encontraba abierto en la Fábrica de Tabacos de Marianao.

En total, este jueves La Habana amaneció con nueve eventos de transmisión de la COVID-19 y 1.226 focos de la enfermedad activos, de ellos 64 con cinco o más casos, señala la fuente.

Torres Iríbar “criticó severamente las indisciplinas en los centros estatales y exigió la aplicación de multas a los infractores, empezando por los cuadros de esas instituciones” y “requirió a los directivos de la Inspección Sanitaria Estatal por el insuficiente nivel de acciones impositivas”, reportó la publicación oficial.

“No podemos ser permisivos ni tolerantes con las indisciplinas institucionales, porque se nos complicará aún más la situación epidemiológica”, aseguró el presidente del CDP, quien, además, llamó a “quitarle al personal sanitario de la comunidad toda la carga burocrática a la que se les ha sometido en los últimos años”, lo que, dijo, afecta el chequeo diario del estado de salud de los vecinos y la prevención de las enfermedades.

“Esa labor minuciosa, ese seguimiento diario a sus pacientes, es vital para cortar la transmisión del virus y controlar la epidemia”, comentó.

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Al cierre de este miércoles, La Habana reportó 364 nuevos casos de la COVID-19, seis de ellos importados. Entre los casos autóctonos, 35 son trabajadores de la Salud, de los cuales 10 tienen fuente de infección institucional, de acuerdo con Tribuna.

En la capital cubana se mantienen ingresados 2.393 casos activos de la enfermedad, de los cuales 30 se atienden en salas de terapia intensiva: 17 en estado crítico y 13 graves. 

Las autoridades habaneras también confirmaron que en la ciudad se acometen acciones para disponer en los próximos días de unas 1.500 nuevas capacidades para el aislamiento de sospechosos y contactos de casos positivos.

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