Robertico Ramos, el hallazgo (II)

Prefiere el diálogo, por una Cuba inclusiva, de múltiples voces, sin bloqueos de ningún tipo, con la certeza de que ese es el único camino para llegar a la Cuba luminosa e iluminadora que todos soñamos y necesitamos.

Robertico Ramos Mori. Foto: Kaloian.

Robertico Ramos, el hallazgo (II)

En esta segunda parte de mi conversación con Robertico Ramos, me cuenta sobre los hechos que ocurrieron en la marcha por los derechos LGTBIQ en Cuba, el 11 de abril de 2019, por la céntrica avenida del Paseo del Prado, donde él fue participante activo. ¿Quién organizó la marcha? ¿Quiénes marcharon y por qué? ¿Cómo transcurrió la misma? ¿Cómo termino? ¿Por qué la intervención policial?

Robertico, sin el más mínimo tapujo, con una soltura y seguridad envidiables, sin resentimiento, ni odio, ni traumas, y tampoco resignación, más bien con mucho sentido del humor y una inteligente generosidad, me habla de sus captores. Cuenta del arbitrario y anticonstitucional método en que fue arrestado en su centro de trabajo, el estudio de tatuaje La Marca, por agentes policiales encubiertos sin identificarse, engañado con inocente pretexto, como mismo se opera en un secuestro.

Esa forma suya de enfrentar la adversidad, los errores imperdonables de otros, ese positivismo con que enfrenta la vida y sus desmanes, las consecuencias del activismo en Cuba, me hacen corroborar que, efectivamente, el Robert pertenece a esa casta de cubanos que apuesta por no regodearse en el odio, los dolores, el resentimiento, ni mucho menos quedarse paralizado. Robertico Ramos prefiere el diálogo, por una Cuba inclusiva, de múltiples voces, sin bloqueos de ningún tipo, con la certeza de que ese es el único camino para llegar a la Cuba luminosa e iluminadora que todos soñamos y necesitamos.

Vea también: 

Robertico Ramos, el hallazgo (I)

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