La Habana amaneció con el cielo gris este lunes 15 de noviembre, una jornada que ha generado muchas expectativas dentro y fuera de la Isla. Un frente frío, con sus nubes invernales y una tenue llovizna intermitente, le ganó la pulsada al sol y maquilló la cotidianidad de la capital cubana, al menos en la mañana, el día que Cuba reabre sus fronteras a gran escala y está convocada una marcha opositora.
Aun con los augurios que rodeaban el día, la ciudad lucía en calma, según pudo comprobar OnCuba en un recorrido por varios municipios habaneros como el Cerro, Centro Habana y La Habana Vieja. Personas en las calles, colas en las tiendas, escuelas e instituciones médicas abiertas, el transporte urbano y las instituciones estatales funcionando con normalidad, era el paisaje hasta este mediodía en las zonas visitadas, y tampoco era visible un gran despliegue de policías uniformados. Sí algunos efectivos organizando colas, como es ya habitual, o parados en esquinas, solos o en parejas, o algún carro patrullero en sitios estratégicos de la ciudad, pero nada parecido a las jornadas posteriores al 11 de julio.
En contraste, la agencia española EFE, tras recorrer “calles cercanas al Capitolio Nacional, El Prado, el barrio de El Vedado y otros más alejados del centro de la ciudad como el de La Lisa” informó sobre una “fuerte presencia policial” y patrullas y agentes vigilando las calles. También reportó que “en algunas viviendas se podían ver sábanas blancas extendidas en respuesta a la iniciativa de la plataforma opositora Archipiélago, que pidió colgarlas en respaldo a la marcha”, algo que tampoco vimos de manera significativa en nuestro recorrido.
Sí podían verse, a tono con los últimos días, banderas cubanas en algunos balcones y portales, y también en centros laborables, al tiempo que en varios parques se escuchaba música y en otros sitios, como en una calle aledaña a la intersección de las avenidas Infanta y Zanja, había puntos de venta de panes y confituras por el Estado. También estaban abiertas algunas cafeterías y otros establecimientos privados, como los de reparación de teléfonos móviles de la avenida Carlos III. Las personas vestían de cualquier color y no había grupos concentrados vestidos de blanco o rojo, o manifestándose a favor de una determinada tendencia política.
Transeúntes preguntados por OnCuba durante el recorrido dijeron estar viviendo con normalidad este lunes, si bien más de uno se mostró preocupado de que pudiera “pasar algo” en la ciudad, y una madre confesó que había preferido no enviar a su hijo a la escuela y que probablemente no lo hiciera en unos días hasta tener la seguridad de que “todo esté tranquilo”. Otros, en cambio, afirmaron que no creían que ahora se repitieran sucesos como los del 11 de julio y refirieron la difícil situación económica actual del país y el constante incremento de los precios, como sus preocupaciones más perentorias.
Luego de un domingo marcado por el fallido intento de marcha del activista y dramaturgo Yunior García ―impedido de salir de su vivienda por fuerzas y simpatizantes del gobierno― y por actividades culturales y juveniles progubernamentales en diferentes sitios de La Habana, hasta el mediodía de este lunes no parecía haber ocurrido ningún intento de marcha opositora u otro incidente o enfrentamiento en las calles. No obstante, activistas han denunciado que son objeto de vigilancia policial y acoso de simpatizantes del gobierno, que les han realizado “actos de repudio” y buscan impedir que salgan a marchar según lo previsto, mientras en las redes se han sucedido mensajes de personas de diverso signo contra la realización de estos actos.
Sobre el caso particular de García, EFE reportó que “el entorno del barrio del joven dramaturgo distaba mucho este lunes al de la víspera, cuando agentes y personas afines al Gobierno estaban apilados en su puerta para impedir que saliera a marchar”, y aseguró que el activista permanecía “incomunicado en su casa, vigilada aún por agentes, e ‘indispuesto con una migraña’”, citando a un familiar que vive en su domicilio.
También esta mañana reiniciaron las clases presenciales para los alumnos de primaria ―salvo los de 6to grado, que ya lo habían hecho el lunes pasado―, con lo que ya todos los niveles de enseñanza retornaron de manera a física a las escuelas tras el parón obligatorio por la pandemia.
En La Habana tuvo lugar el acto oficial por el reinicio del período lectivo, en la llamada Ciudad Escolar Libertad, al que asistió el presidente Miguel Díaz-Canel, al tiempo que en el centro histórico está en marcha un grupo de actividades en la víspera de la conmemoración, este martes, del aniversario 502 de la fundación de la otrora villa de San Cristóbal. Entre ellas, inauguración de obras, homenajes al desaparecido historiador Eusebio Leal, del que se develaría una escultura en bronce, y, ya en la noche, la tradicional ceremonia en El Templete.