La XIII Bienal de La Habana ha convertido a la capital de Cuba en una inmensa galería. Se trata de un mega evento que, bajo el lema “La construcción de lo posible”, desborda los escenarios artísticos tradicionales y sacude la vida cultural de la ciudad durante todo un mes.
Desde su apertura el pasado viernes, la Bienal ha contagiado con su “fiebre” galerías, calles, museos y otras instituciones habaneras. En apenas tres días, se han sucedido múltiples exposiciones, performances, talleres e intervenciones plásticas, entre otras actividades.
Unos 300 artistas de medio centenar de países –con énfasis en el llamado Tercer Mundo, pero también de Europa y los Estados Unidos– participan oficialmente en el evento, a los que se unen curadores, teóricos y otros cientos de creadores involucrados en muestras y acciones colaterales. La nómina es tan amplia y variada como el propio arte que puede apreciarse ya a lo largo y ancho de La Habana.
Entre las muestras inauguradas hasta la fecha merece protagonismo la del Centro de Arte Contemporáneo Wifredo Lam, que abrió oficialmente las puertas de la Bienal y reúne a artistas como el maliense Abdoulaye Konaté, la salvadoreña Alexia Miranda, el uruguayo Fernando Foglino y la cubana Tamara Campo.
También resaltan las de Factoría Habana, el Pabellón Cuba y el Museo Nacional de Bellas Artes, que combinan disímiles estéticas y expresiones artísticas como las de la mexicana Lucía Aguilar, el sirio-alemán Manaf Halbouni y los cubanos Carlos Garaioca, Marco Antonio Castillo y Alexis Leyva Machado “Kcho”, así como las de los Premios Nacionales de Artes Plásticas José Ángel Toirac y René Francisco.
Imposible obviar el proyecto “Detrás del Muro”, que coordina Juanito Delgado y que por tercera Bienal consecutiva ha tomado el privilegiado entorno del Malecón habanero. Más de 60 artistas de una docena de naciones integran esta vez una propuesta que pone a dialogar a los transúentes con espectáculares y sugerentes obras de arte.
Pero la Bienal apenas está comenzando. Mucho falta por ver aún en las próximas semanas, no solo en La Habana sino también en otras provincias cubanas como Pinar del Río, Matanzas, Cienfuegos y Camagüey.
Exposiciones como las del cubano Manuel Mendive, el panameño Antonio José Guzmán y el francés Yves Tremorin, una acción plástica en los sitios afectados por el tornado del pasado enero y la apertura del Corredor Cultural de la céntrica calle Línea, son algunos de los próximos platos fuertes.