El actor Kirk Douglas, una gran estrella de la pantalla grande, falleció hoy en su mansión de Beverly Hills a los 103 años.
Nacido en Amsterdan, New York, en el seno de una familia judía bielorrusa emigrada, su verdadero nombre era Issur Danielovitch. Se unió a la Marina en 1941, poco después de que Estados Unidos se involucrara en la Segunda Guerra Mundial, pero fue dado de baja por heridas sufridas durante la caída accidental de una carga de profundidad en el submarino donde estaba.
Después de la guerra regresó a Nueva York y encontró trabajo en radio, teatro y comerciales. En 1946 su amiga la actriz Lauren Bacall, lo ayudó a conseguir su primer papel en el cine al recomendarlo al productor Hal B. Wallis. The Strange Love of Martha Ivers, con Barbara Stanwyck, marcó su debut en la pantalla.
A lo largo de las décadas de los 50 y 60, hizo diversidad de roles en el cine, pero sobresalió por oestes como Along the Great Divide (1951) y Lonely Are the Brave (1962), así como en el género de aventuras. En 1950 interpretó a Rick Martin en Young Man with a Horn, basada en la novela homónima de Dorothy Baker e inspirada en la vida de Bix Beiderbecke, el trompetista de jazz.
Al año siguiente caracterizó a un periodista en Ace in the Hole, la primera experiencia de Billy Wilder como escritor y productor. Ese año ganó un premio en el Festival de Cine de Venecia.
En Cuba se le conoce sobre todo por películas como Veinte mil leguas de viaje submarino (1955), Trapecio (1956), junto a Gina Lollobrigida y Burt Lancaster, Los vikingos (1958), junto a Tony Curtis, y la superproducción Espartaco (1960). También por su caracterización de Vincent Van Goh en Lust for Life (1956).
El American Film Institute lo nombró una de las cincuenta mejores estrellas del cine estadounidense. Fue nominado a tres premios Primetime Emmy y a tres premios Oscar. En 1996 ganó un Premio Honorario de la Academia por “cincuenta años como fuerza creativa y moral en la comunidad cinematográfica”.
Douglas jugó un papel fundamental para poner fin a la lista negra de Hollywood y al Comité de Actividades Antiamericanas, junto con el director Otto Preminger.
Su hijo, el también actor Michael Douglas, dijo en un comunicado: “Es con gran tristeza que mis hermanos y yo anunciamos que Kirk Douglas nos dejó hoy a la edad de 103 años. Para el mundo era una leyenda, un actor de la época dorada de las películas que vivió bien en sus años dorados, un humanista cuyo compromiso con la justicia y las causas en las que creía establecieron un estándar al que todos aspiramos”.
Y continuó: “Pero para mí y para mis hermanos Joel y Peter, él era simplemente papá; para Catherine, un maravilloso suegro; para sus nietos y bisnieto, su amoroso abuelo; y para su esposa Anne, un esposo maravilloso”.
“Deja un legado en el cine que perdurará en las generaciones venideras, y una historia como un reconocido filántropo que trabajó para ayudar al público y traer la paz al planeta”, agregó. “Permítanme terminar con las palabras que le dije en su último cumpleaños y que siempre serán ciertas: papá, te quiero mucho y estoy muy orgulloso de ser tu hijo”.