Corina Mestre: perfección y maestría

No valen las palabras para describir el sentimiento del público cuando Corina Mestre sube al escenario. Su presencia en las tablas provoca una sensación sobrecogedora, de admiración y asombro, entre los asistentes, quienes saben de antemano que disfrutarán de una actuación exquisita.

Desbordante de experiencia y talento, Corina es nuevamente reconocida por su maravilloso trabajo. Este viernes la actriz cubana recibirá la distinción Espejo de Paciencia, máximo reconocimiento de la cultura en la central provincia de Camagüey.

En esta ocasión, Mestre será homenajeada no solo por sus magníficas dotes como actriz, sino también por sus innumerables aportes al desarrollo de las
artes escénicas cubanas  desde la preparación de talentos en formación, que la han llevado a ser considerada actualmente la madre de la enseñanza
artística en el país.

La artista será agasajada durante la ceremonia de apertura del XIV Festival Nacional de Teatro que tiene por sede permanente a esa ciudad. Durante la
preparación del evento Mestre fungió como presidenta de la comisión evaluadora de las obras a presentarse en la muestra.

Corina ha dejado una impronta en la creación artística y en el magisterio. En 1981 se licenció en Artes Escénicas en el Instituto Superior de Arte, pocos años después regresaría a la casa de altos estudios para transmitir  sus conocimientos a las nuevas generaciones.

Su labor educativa se ha extendido a toda la Isla. Tal es el caso de la provincia de Camagüey a donde viaja varias veces al año para apoyar los programas de actuación en la Academia de las Artes Vicentina de la Torre.

Durante sus más de cuarenta años de carrera artística Mestre ha intercambiado con grandes de la escena insular como Raquel y Vicente Revuelta, Abelardo Estorino, Héctor Quintero, José Milián, y otros. Además ha intervenido en clásicos de todos los tiempos como Macbeth y Bodas de sangre.

Los televidentes cubanos la recuerdan con especial cariño por sus actuaciones de madre intransigente y protectora en las novelas La Casa de Bernalda Alba, Doble Juego y Salir de Noche.

En más de una ocasión sus presentaciones la han hecho merecedora del Premio a la Mejor Actuación femenina. También ostenta la Distinción por la Cultura
Nacional y la Medalla Nicolás Guillén. Este nuevo reconocimiento es motivo de júbilo para sus estudiantes y su público.

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