Cubana Rachel Valdés une arte y moda con una instalación artística en una tienda de ropas

Se trata de la obra "Eternidad", una habitación forrada con espejos en la que imágenes que tienen que ver con la naturaleza se suceden arropadas con un sonido envolvente en frecuencia lomb.

Rachel Valdés. Foto: elperiodico.com/Stradivarius

La artista cubana Rachel Valdés ha creado por primera vez una instalación artística en una tienda de ropa, un reclamo para lograr que los jóvenes se acerquen al arte con sus mismos instrumentos: la tecnología.

Después de exponer su obra Times Square y de posicionar sus piezas en colecciones privadas y públicas como The Donald Robin Foundation o The Rockefeller Brothers Foundation, Valdés ha afrontado el reto de crear un espacio inmersivo en un entorno para jóvenes, un reclamo de la nueva tienda que Stradivarius abrirá mañana en el Edificio España, en la renovada plaza de España de Madrid.

Durante un mes, se podrá visitar Eternidad, la nueva obra inmersiva de Rachel Valdés (La Habana, 1990), actual embajadora del proyecto Stradivarius Meets ART, una iniciativa con que la firma apoya a nuevos talentos emergentes de diferentes disciplinas.

Acostumbrada a exponer en bienales y en espacios vinculados al arte, Valdés ha señalado este jueves en una charla con la agencia Efe que el proyecto ha supuesto un reto porque va dirigido a un público al que no está acostumbrada, pero confía poder “atrapar su atención”.

En una habitación forrada con espejos, una sucesión de imágenes que tienen que ver con la naturaleza se suceden arropadas con un sonido envolvente en frecuencia lomb.

“Me gusta provocar estados de presencia en un mundo tan ajetreado. Pretendo que la gente se conecte con la pieza”, explica, una llamada de atención a la pausa en una de las principales arterias de la capital.

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Para Valdés, “el espectador es un co-creador de la obra” porque a cada uno le ofrece diferentes percepciones y le genera “distintos estados de ánimo” mediante recursos visuales y de sonido con los que crea “una realidad paralela”, una experiencia inmersiva que invita al diálogo “con uno mismo y con el espacio”.

Una obra que tiene que ver con la tecnología, “una llamada de atención a las nuevas generaciones. Una manera de acercarles el arte utilizando sus mismos instrumentos”, señala.

Con este nuevo espacio, la marca de moda joven sigue poniendo el foco en la sostenibilidad con mayor presencia de materiales de origen natural y sostenible como el cemento o la cal, de procedencia mineral, usados en la textura de varias paredes.

Los tejidos utilizados en las cortinas de los probadores son 100% reciclados a partir de residuos de la industria textil.

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