El gran actor cubano Mario Balmaseda, figura imprescindible del teatro, el cine y la televisión en la Isla, falleció en La Habana este sábado. Tenía 81 años de edad.
“Ha muerto el gran actor cubano Mario Balmaseda, quien fuera Lenin, Maceo, Eduardo, Manolo, Reinier y otros tantos personajes imprescindibles para entender lo que somos”, escribió en Twitter Alpidio Alonso, ministro de cultura de Cuba al informar sobre el fallecimiento del artista.
Ha muerto el gran actor cubano Mario Balmaseda, quien fuera Lenin, Maceo, Eduardo, Manolo, Reinier y otros tantos personajes imprescindibles para entender lo que somos. Para familiares y amigos, nuestras condolencias. Para Mario, toda la gratitud y el respeto de su pueblo. pic.twitter.com/kPydMY4J58
— Alpidio Alonso Grau (@AlpidioAlonsoG) October 8, 2022
Balmaseda (La Habana, 1941-2022) tuvo una brillante trayectoria artística de más de 50 años, desde sus primeros pasos en el Teatro Martí con el célebre circo Santos y Artigas, en el que su madre trabajaba como declamadora.
Fue en los años 60, ya tras el triunfo de la Revolución Cubana, que se vinculó al mundo del teatro dramático, y estudió dramaturgia en el Teatro Nacional de Cuba y en la República Democrática Alemana. En las tablas desarrolló una carrera notable y descolló no solo como actor, sino también como director. Por este reconocido desempeño mereció en 2006 el Premio Nacional de Teatro.
Fuera de esta manifestación, Balmaseda brilló también en la televisión y el cine cubanos, medios que de igual manera lo reconocieron con su Premio Nacional, en 2019 y en 2021 respectivamente.
En el séptimo arte se estrenó en 1971 con la película Los días del agua, y en ese medio construyó una sólida filmografía que incluye títulos como El hombre de Maisinicú, De cierta manera, La última cena, Se permuta, Mi socio Manolo y La obra del siglo, así como una icónica interpretación del general Antonio Maceo en Baraguá.
En la pequeña pantalla, aunque estuvo fuera de ella en parte de su carrera, se le recuerda en aventuras como Juan Quin Quin, telenovelas como Un bolero para Eduardo y series como la antológica En silencio ha tenido que ser, en la que encarnó a Reinier, un oficial de la Seguridad del Estado, jefe y amigo de Sergio, el protagonista.
Su fallecimiento ha motivado numerosos mensajes de condolencias en las redes a sus familiares y amigos, tanto de autoridades, instituciones y colegas, como de internautas en general, así como mensajes de pesar por la pérdida de quien, con toda justicia, fue uno de los más relevantes actores nacidos en Cuba.