Mañana de domingo luminosa para Joaquín Sabina y sus seguidores, pues, tras su internamiento hace once días para ser operado de un hematoma intracraneal de urgencia, recibió el alta y abandonó la Clínica Ruber Internacional acompañado de su pareja Jimena Coronado. La recuperación seguirá en casa.
Según dieron cuenta todos los medios que cubrieron la noticia, Sabina salió del hospital por sus propios medios y en su mejor estilo, sombrero, gafas de sol y un cigarro. La famosa Jimena, a quien Sabina le escribió uno de sus temas, condujo el vehículo de vuelta.
El cantautor había llegado al hospital el pasado 12 de febrero tras una gran caída desde el escenario del Winzink Center de Madrid, donde ofrecía otro concierto como parte de su gira “No hay dos sin tres” junto a Joan Manuel Serrat.
La caída de Joaquín Sabina le produjo un traumatismo de hombro izquierdo, toráxico y craneoencefálico por lo que fue intervenido quirúrgicamente, dejándolo ingresado hasta hoy. Primero estuvo en una sala de cuidados intensivos hasta que cuatro días después fue trasladado a planta.