Adalberto Álvarez, uno de los más grandes músicos cubanos de todos los tiempos, falleció este miércoles en La Habana luego de haber luchado durante semanas contra la COVID-19. La noticia trascendió por el director de la Empresa de Grabaciones y Ediciones Musicales (Egrem) desde su perfil en Twitter.
En su tuit, Mario Escalona escribió: “el adiós para la eternidad de un Gran Caballero, Adalberto Álvarez ha fallecido. Nuestro músico, compositor, arreglista, director, amigo y gran hombre de familia tendrá siempre un sitial de honor en la música cubana. Tu eterna alegría nos acompañará siempre!!! EPD”.
Conocida la lamentable noticia de su fallecimiento, que ha consternado a seguidores y amigos —quienes estuvieron pendientes de su salud desde que se conoció su gravedad—; intelectuales, investigadores musicales y músicos han hecho saber su pesar a la familia del artista.
Agrupaciones como la Orquesta Aragón, Los Van Van y Havana D’Primera también han manifestado su pesar por la muerte del conocido músico y compositor en las redes sociales.
El grupo Síntesis, por su parte, dedicó un tema desde sus redes sociales a Adalberto que la emoción no les permitió terminar.
Álvarez, llamado también como “el caballero del son”, ha sido uno de los músicos más populares y queridos por el pueblo de Cuba y cuenta con una carrera musical repleta en aportes a la tradición musical bailable de la Isla. Su obra trascendió las fronteras nacionales para colocar su nombre entre los mayores renovadores del son o la salsa.
Además del aspecto musical, su obra se caracteriza por la incorporación de elementos religiosos, característica que volvió algunos de sus temas altamente famosos, como sucedió con el hit “¿Y qué tú quieres que te den?”, un tema de grandes valores y de especial significado para los cubanos en medio de la crisis de los noventa.
Para ese momento, Adalberto Álvarez se había convierto en uno de los imprescindibles y su orquesta, Adalberto Álvarez y su son, creada en 1984, marcaban la pauta de la música bailable en la Isla junto a otras grandes como Los Van Van, NG La Banda o Elio Revé y su Charangón.
Canciones como “Esperando que vuelva María” fueron algunas de sus cartas de triunfo y prueba de su talento como compositor y arreglista.
Pero seis años antes, con la creación de Son 14, en Santiago de Cuba, ya había hecho historia con composiciones como el clásico “A Bayamo en coche”.
Según sus datos biográficos públicos, Adalberto Álvarez estudió en la Escuela Nacional de Arte (ENA) desde 1966 hasta 1972, fue profesor de Literatura Musical en la Escuela Provincial de Arte de Camagüey, donde fue arreglista y director del conjunto de su padre, Enrique Fortunato Álvarez (Nené).
Sus aportes a la música popular cubana —que desarrolló a plenitud en la orquesta Adalberto Álvarez y su Son— lo colocan en la cumbre de la música cubana, junto a los más grandes y reconocidos; Adalberto se ganó, además, el inmenso cariño y respeto de su pueblo.
Desde OnCuba enviamos nuestras condolencias a sus familiares y amigos y lamentamos la inmensa pérdida para todas las cubanas y cubanos, la música de Adalberto quedará por siempre.
