Santiago Feliú: sobrevolando un sueño que acuna el tiempo*

Fotos: Abel Carmenate

No hubo diluvio que impidiera el encuentro con el zurdo maravilloso. Santiago Feliú celebró su cumpleaños 50 como más le gusta: trovando y rocanroleando.

La sala Che Guevara de la Casa de las Américas estuvo llena, a pesar de ser el viernes más lluvioso de este año en La Habana. Para los que hemos crecido acompañados de la poesía y la música de Santiago, las más de tres horas que duró el concierto fueron un regalo, más para nosotros que para él.  Según mi querido Fidelito fueron 36 canciones, pero nos quedamos con las ganas.

Reconocí muchos rostros de los que lo hemos seguido por todas partes desde hace más de 20 años, rostros cómplices, que se sienten familiares aunque no hayamos cruzado nunca una palabra. Cada vez que estoy en un concierto de Santiago, siento que pudiera ser amiga de la mayoría de las personas que están ahí, no puede ser de otra forma si suspiramos juntos cuando oímos los primeros acordes de Ansias del Alba, Vida, Ayer y hoy enamorado, Búscame, Ella y él, Bolero, Ay, la vida… y tantas otras.

En este concierto Santiago paseó por los discos: Vida, Náuseas de fin de siglo, Futuro inmediato, Sin Julieta, y Ay, la vida. A veces al piano, otras con guitarra y armónica y, las más, a dos guitarras con Roberto Luis Gómez Rodríguez. Nos regaló, además, un dúo maravilloso con Xiomara Laugart, voz imprescindible de la canción cubana.

A su cumpleaños asistimos más de los que pudimos llegar. Cada uno de nosotros llevó consigo todos aquellos amigos entrañables con los que hemos compartido a Santiago. Otros cantaron para mí el viernes, encarnados en Santiago Feliú estuvieron las descargas con Jorgito, Oscar, Julito, Marchena…; escuché los coros con las letras cambiadas e indecibles que hacíamos las chicas del grupo, sentí el ambiente de los parques de Santa Clara, de los cuartos de la beca de la universidad, del malecón, de la casa del Vale, de los arrecifes del litoral…

Ese es un poder que pocos tienen, una magia que aparece raramente. Con Santiago comparto la pasión por la Isla que nos vio nacer, gracias a él he y me han enamorado. En sus canciones me encuentro con los amigos que ya no están, ha sido luz en mi camino, me ha hecho mejor persona, he sido feliz.

Que la vida te devuelva…

*Búscame, Santiago Feliú

Búscame donde sientas que está ardiendo, 

donde se eternizan los recuerdos,

donde no me encuentres, donde estuve,

donde se olvidaron de quererte.

Si todo el amor del mundo está tiritando,

si cada segundo cuesta un siglo de espera,

dime si lo que sientes no es lo profundo,

en cada momento del alma de esta escalera.

Búscame donde la ilusión tuvo hijos,

sobrevolando un sueño que acuna el tiempo,

en la más melancólica melodía,

incinerando infiernos para tu vida.
 

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