La célebre cantante norteamericana Katy Perry llegó a la sede de La Colmenita bajo agua y con apagón. Pero a la tercera canción ya andaba bailando y repartiendo “whoa”, a diestra y siniestra, emboscada vilmente con saetas vanvaneras, maravillada por tanto virtuosismo precoz, con tanto team-pop, con tanto toca-toca…
La reacción de Katy no debería haber sorprendido a Carlos “Tin” Cremata, cuyos muchachos ya habían puesto a bailar a la mismísima Beyonce, cuando venir a Cuba no era moda ni La Habana trending topic. Sin embargo, esta vez todo fue más espontáneo, íntimo y humano, al punto que la colorida diva no pudo contenerse y preguntó: “¿cuándo nos vamos de gira?”.
Resulta que tanto la compañía infantil cubana como la cantante son embajadores mundiales de UNICEF, y esa causa común también los une. Vistas las cosas que se ven, nada parece imposible.
Katy llegó acompañada de Isaac Delgado. Ambos compartieron escenario el pasado sábado en la Fábrica de Arte, y seguramente él le adelantó de qué iba La Colmenita, pero evidentemente la diva no se esperaba algo así. De entrada, no esperó encontrarse un ambiente tan familiar, ni una música que la hizo saltar como un resorte tras el primer “tumbao”.
Según “Tin”, Katy se defiende bailando timba, y hasta coreó una de sus canciones, que los colmeneros le regalaron. “Hubo una química excelente -contó Cremata a OnCuba-, los niños la sacaron a bailar y ella se soltó. Les hizo mil preguntas, gritó entusismada y elogió a todos, asegurando que esta actuación había sido lo mejor hasta ahora de su visita a La Habana. Isaac me confesó luego que el encuentro lo hizo sentir, una vez más, muy orgulloso de ser cubano”.
Mientras, Katy parece haberle cogido el gusto a La Habana: vino la semana pasada, estuvo en la Fábrica de Arte, se fue a Puerto Rico a un concierto y regresó el martes para seguir descubriendo una ciudad que de súbito seduce a todos: en menos de una semana han pasado por aquí desde el gran Mick Jagger hasta el campeón Floyd Mayweather Jr., posando entre reliquias rodantes y ruinas del pasado.
Y esto recién comienza. A ver cuánto dura…
