A Mijaín López lo quiere destronar un cubano

En la lucha grecorromana de los Panamericanos de Lima, el luchador cubano Yasmani Acosta, nacionalizado chileno, espera encontrarse en la final de los 130 kilógramos con el estelar Mijaín López.

Yasmani Acosta, matancero de Agramonte, puede ser el principal rival de Mijaín López en los Panamericanos de Lima. Foto: Tomada de La Hora.

Llegar hasta la final y vencer al todopoderoso Mijaín López son los objetivos del luchador cubano Yasmani Acosta, nacionalizado chileno, quien está consciente de que para ganar el oro tendrá que pasar por encima de su ídolo, antiguo compañero, amigo y triple campeón olímpico.

Acosta sabe que Mijaín es el máximo exponente de esta disciplina en el mundo en los 130 kilogramos, por lo que toda su preparación de cara a los Juegos Panamericanos de Lima 2019, que comenzarán el próximo 26 de julio, está enfocada a ser capaz de batir al gigante pinareño.

“Paso a paso, pero sé que mi mayor rival va a ser Mijaín. Estoy concentrado en eso”, afirmó Acosta sobre las expectativas y objetivos de su primera participación en la competencia panamericana.

Yasmani Acosta representó a Cuba hasta el 2015, cuando decidió no regresar a la Isla tras un torneo en Santiago de Chile. Foto: Marcelo Segura.

Acosta habla de Mijaín con una mezcla de admiración y respeto que contrasta con su espectacular apariencia y tamaño, y eso es porque le conoce bien.

“Fuimos compañeros de equipo por nueve años (en Cuba), entrenábamos todos los días mañana y tarde, y muchas cosas de las que sé hoy las sé por él”, explicó el atleta, bronce mundial en el 2017 representando a Chile.

Mijaín es el rival a batir en los últimos 15 años en la lucha grecorromana. Da igual que sean Juegos Olímpicos, Panamericanos o Mundiales, es casi imbatible, y esa es la tendencia que Acosta pretende revertir.

Hasta la fecha, Mijaín ha conquistado tres oros olímpicos consecutivos, cuatro preseas doradas en Panamericanos y cinco Campeonatos Mundiales, además de otras competiciones regionales y nacionales. Y en los que no ganó, fue segundo (salvo su primera competencia profesional, los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, en los que clasificó quinto).

“Es mi ídolo (…) y ahora va a ser mi rival. Es un medidor y voy a dar el máximo. Yo quiero ganar al igual que él quiere ganar”, destacó Acosta.

El luchador chileno enfoca sus primeros Panamericanos como un reto que pasa ganar a López, pero también como una preparación para los próximo Juegos Olímpicos de Tokio en 2020.

“Con el resto de los rivales de América sé que puedo competir y no estar tan presionado. Con Mijaín, la lucha ya va a tener que ser diferente. Estoy ahí con mi entrenador, tenemos una estrategia de lucha. Vamos a enfrentarnos al mejor del mundo y un atleta de mucha más trayectoria deportiva y experiencia, eso me motiva muchísimo”, destacó.

Por este motivo, preparó a conciencia y con antelación el entrenamiento previo, programando un viaje a Europa del este para luchar con rivales de mayor exigencia.

“En América hay buenos luchadores, lo que pasa es que en mi división (130 kilos) me cuesta encontrar rivales como para prepararme al 100 %. Podría ser Cuba, pero no puedo entrar en este momento, por lo que la solución es ir a Europa. Allí hay más personas de mi peso que pueden exigirme mucho más”, dijo Acosta.

Acosta compite por Chile desde el 2017, aunque le costó establecerse en el país sudamericano. Foto: Tomada de su Instagram.

Yasmani, quien dejó la delegación cubana en el Panamericano de la disciplina en el 2015, precisamente en Santiago de Chile, llegará a la cita peruana en su mejor momento, pues ganó el oro en los Juegos Suramericanos de Cochabamba (Bolivia) hace casi un año, presea dorada que sumó a la obtenida el año anterior en el Campeonato Sudamericano en Río de Janeiro (Brasil).

“Sé que voy a llegar bien. Tengo que llegar bien a la competencia y estoy muy motivado. Quiero que las cosas salgan bien porque van a ser mis primeros Juegos (Panamericanos) y quiero estar 100 %”, señaló.

Acosta indicó que su estreno en esta competición provoca que se prepare y se concentre más, aunque le pone “el mismo corazón y esfuerzo a todas las competiciones”.

Sin embargo, reconoció que le causa “algo de tensión” el hecho de que haya tanto público y cámaras de televisión, algo que se desvanece cuando comienza el combate.

“Se te olvida todo, solamente escucho la voz de mi entrenador y nada más”, señaló.

“Nunca me he sentido presionado en un escenario así, con tantas cámaras, personas y atención, pero creo que va a ser motivador estar en un evento a ese nivel”, agregó Acosta.

Y más en un deporte tan vistoso y espectacular como la lucha grecorromana, disciplina de la que el antillano valora “el esfuerzo y la voluntad” de los competidores.

“Es bonito ver personas que están perdiendo el combate, ya sin energía ni fuerza, y ves que no aflojan ni se rinden y ganan los combates. A mí me gusta ver eso, ver el esfuerzo y el sacrificio de las personas”, concluyó.

Salir de la versión móvil