En poco más de 72 horas, el alpinista cubano Yandy Núñez Martínez partirá rumbo a Argentina para intentar conquistar la cima del Aconcagua, otro imponente reto luego de sus espectaculares escaladas al Monte Elbrus (5 642 metros) y Pico de Orizaba (5 636), las mayores alturas de Europa y México, respectivamente.
Núñez Martínez acometerá la subida del punto más alto de Latinoamérica (6 960) junto a los mexicanos Ricardo Calderón, Alfonso Segundo y Pablo Frich, alpinistas del estado de Michoacán, con quienes formará una expedición sin guías.
“Vamos por nuestros medios, sin contratar un servicio especial. Todo va organizado por nosotros. Vamos a estar un promedio de 14 días en la montaña a una gran altitud donde todo lo tenemos que elaborar nosotros, el tema de logística y comida es fundamental ya que la comida la cocinamos y la transportamos nosotros hasta todos los campamentos de altura”, repasa el escalador en exclusiva para OnCuba.
Yandy y sus colegas mexicanos solo solicitarán un servicio de porteo de material en la entrada del Parque Nacional del Aconcagua hasta el Campamento Base de la montaña, ubicada en la cordillera principal de los Andes, específicamente en la provincia argentina de Mendoza.
A priori, la enésima aventura del cubano suena como una de las más exigentes de su carrera como alpinista, aunque asegura estar en buena forma para conseguir el objetivo.
“He tenido y he buscado una buena y dura preparación. Antes de salir de Islandia estuve nadando bastante, haciendo ejercicios y subiendo una montaña pequeña que tengo por allá, el monte Esja. No es nada de alta, pero de entrenamiento siempre sirve”, apunta Yandy, cuya verdadera puesta a punto la ha desarrollado en México.
En la nación azteca, además de conquistar la cima del Pico de Orizaba el pasado sábado, también realizó jornadas de entrenamiento en Iztaccihuatl, una montaña en forma de mujer que escaló en par de ocasiones.
“Una vez fuimos hasta el refugio de los Cien, a 4 720 metros. En esa ocasión no busqué hacer cima, solo entrenar, y la otra vez sí llegamos hasta lo más alto, a 5 230 metros. Esta montaña, para mí, es mucho más demandante, larga y dura que el Orizaba, me sentí mucho más este ascenso”, relató Núñez Martínez.
Según sus propias palabras, no será el primer antillano en escalar el Aconcagua. “Tengo conocimiento de que, hasta ahora, solo está registrado de la existencia de un cubano que llegó a la cima”, apunta.
Aunque la prueba del Aconcagua no permite distracciones de ninguna índole, Yandy Núñez ve este examen como una oportunidad para ganar enteros de cara a su objetivo más duro: llegar a la cima del Everest.
“En la cima del mundo voy a plantar nuestra bandera cubana. La bandera de todos los cubanos.”