César Prieto sí podrá ser Novato del Año

Las autoridades beisboleras aseguraron a Oncuba que el infielder cienfueguero, refuerzo de Villa Clara, es elegible para el premio de Novato del Año, pero sus marcas no serán homologadas como récords de debutantes

César Prieto en la 58 Serie Nacional de Béisbol. Foto: Ramón Barreras/Periódico Vanguardia

César Prieto en la 58 Serie Nacional de Béisbol. Foto: Ramón Barreras/Periódico Vanguardia

César Prieto (Cienfuegos, 1999) es la sensación de la 58 Serie Nacional de Béisbol. Pasada la furia de Pedro León, desafortunadamente lesionado, el sureño ha acaparado los focos con su espectacular habilidad para embasarse, su velocidad en los senderos y su versatilidad en la defensa alrededor del segundo saco.

Con 19 años, muchos han ubicado a César como favorito para agenciarse el premio de Novato del Año, a pesar de que tuvo una primera toma de contacto en el clásico beisbolero cubano durante la pasada campaña, cuando consumió 17 turnos oficiales (con un solo jit) y jugó 51 entradas al campo (sin errores en 44 lances).

César Prieto mueve el bate con ligereza y tiene una excelente coordinación mano-ojo. Foto: Ramón Barreras/Vanguardia
César Prieto mueve el bate con ligereza y tiene una excelente coordinación mano-ojo. Foto: Ramón Barreras/Vanguardia

Los números indican que su participación en la edición 57 de la Serie Nacional fue efímera, casi testimonial, como se supondría para un jugador suplente de Cienfuegos, colista de la clasificación en la primera fase del torneo.

Y precisamente esas pocas intervenciones son el principal argumento de quienes defienden la candidatura de César como Novato del Año en la presente campaña, durante la cual ha descollado con 117 inatrapables, 63 anotadas, 38 remolques, 22 extrabases y línea ofensiva de 393/437/510/947.

En Cuba no existe ninguna regulación que aclare cuáles son las condiciones que debe cumplir un pelotero para ser Novato del Año, como ocurre, por ejemplo, en Estados Unidos, donde son elegibles para el premio todos aquellos que no sumen más de 130 turnos al bate o 50 innings lanzados en una misma temporada.

En realidad, este galardón lo otorga la prensa, cuyos especialistas escogen al final de la campaña, además, el Todos Estrellas y el Jugador Más Valioso, tanto de la lid regular como de los play off.

Jesús Barroso, director de la Serie Nacional, confirmó a Oncuba que la Dirección Nacional de Béisbol (DNB) no se opondrá si la prensa se decide por César Prieto como Novato del Año, teniendo en cuenta su pobre participación en la Serie 57.

Dicha postura también la confirmaron los hermanos Ariel y Armando Iglesias, miembros del grupo estadístico de la DNB, aunque aclararon que las marcas de César de jits y anotadas no serán consideradas como récords para novatos, contrario a lo que ha sido difundido en diversos canales de la prensa antillana.

“Está muy claramente expuesto en nuestra página que, en los récords para novatos, solo se consideran las estadísticas de la primera Serie Nacional del jugador, y César, si bien es elegible para el premio, ya tuvo una primera participación en el campeonato en la pasada edición. Esta es su segunda Serie”, aseguraron los hermanos.

Por tal motivo, seguirán intactas las marcas para novatos en su primer año establecidas por Kendrys Morales en la edición 41 del clásico beisbolero, cuando pegó 114 inatrapables y anotó 60 carreras, además de pegar 21 jonrones y remolcar 82 anotaciones.

También quedará a salvo el récord de average impuesto por Rolando Verde, quien promedió 360 en la Serie 19.

Si finalmente César es escogido como Novato del Año, no sería la primera vez que el premio recaiga sobre un jugador que tuvo antes una breve aparición en certamen doméstico, como bien develó el colega Norland Rosendo hace una semana.

René Espín (ganador en la Serie 31), Michel Gorguet (Serie 48) y Eliécer Griñán (Serie 56) se llevaron el lauro tras sus breves apariciones en campeonatos anteriores, de acuerdo a las estadísticas de Benigno Daquinta.

El cienfueguero combina tacto con velocidad y poder ocasional. Foto: Yuhki Ohboshi
El cienfueguero combina tacto con velocidad y poder ocasional. Foto: Yuhki Ohboshi

Esculpido a lo Reemberto Rosell

Mucho se ha hablado de César Prieto este año. Capaz de tocar la bola en movimiento y de conectar líneas contra las bardas, el liviano infielder es una auténtica caja de sorpresas en el rectángulo gracias a su impresionante arsenal ofensivo.

César interpreta muy bien cada situación de juego, sabe cuándo un toque de bola puede acabar con el equilibrio del rival, y sabe cuándo debe imponer respeto con un batazo sólido. Además, pocos tienen hoy en Cuba la habilidad de dirigir la pelota a cualquier sector del campo.

Por dichas características, muchos lo han comparado con Luis Ulacia, excelente toletero con un variado registro de habilidades en el plato. Sin embargo, Prieto ha sido moldeado por la mano de Reemberto Rosell, “La Regadera”, uno de los maestros del jit en la historia de la pelota cubana.

Otrora hombre proa de los conjuntos cienfuegueros, con los cuales pegó más de 1 900 indiscutibles en su carrera, Rosell trabajó directamente con César en la temporada muerta, corrigiendo diversos aspectos de su swing y la mecánica en el home.

“Nos centramos sobre todo en mi postura, pero lo más importante es que me enseñó algunas de sus técnicas con el bate y ahora las estoy llevando a la práctica. Realmente me ha ido muy bien con lo que aprendí”, aseguró César a Oncuba.

Prieto dio señales de calidad el pasado año con su inclusión en el Todos Estrellas del Mundial Juvenil de Thunder Bay, Canadá, donde Cuba culminó en la sexta posición. En dicho evento, el joven terminó como líder de los bateadores con 18 cohetes en 31 turnos (581).

César Prieto fue el único cubano que se llevó premios individuales en el Mundial Juvenil del 2017 en Thunder Bay, Canadá. Foto: WSBC
César Prieto fue el único cubano que se llevó premios individuales en el Mundial Juvenil del 2017 en Thunder Bay, Canadá. Foto: WSBC

Sin embargo, su explosión en la 58 Serie es lo que verdaderamente lo ha puesto en el radar. “Uno se va desarrollando en la medida que puede jugar. Si no estás en el terreno no puedes crecer. Por eso me ayudó tanto participar en las Series Sub-23 y tener la oportunidad este año de ser titular con los Elefantes”, precisó.

Justamente, su rendimiento con Cienfuegos le abrió las puertas para ser refuerzo de Villa Clara, algo que, asegura, lo tomó por sorpresa, aunque ya se siente parte de la familia naranja. Con los Leopardos ha asumido la responsabilidad de jugar en el campo corto.

“Ya tenía alguna experiencia, he jugado ahí en categorías inferiores y también en la Serie Nacional con Cienfuegos. Ahora me ayuda el hecho de ocupar la posición y tener a Eduardo Paret cerca, quien ha sido uno de los grandes torpederos de Cuba y uno de mis ídolos. Me ha dicho que no trate de imitarlo, sino que escuche sus consejos y los lleve al campo”, apuntó César, quien tiene también influencia de Erisbel Arruebarruena, “El Grillo”.

“Tuve la oportunidad de compartir cerca de él en Cienfuegos. Yo era un niño cuando despuntó e integró el equipo Cuba. Su manera de jugar en el campo corto ha sido un modelo a seguir”, añadió el sureño.

Por último, César destacó que algún día le gustaría llegar al béisbol profesional, aunque su sueño a corto plazo es integrar la selección nacional. “A todo el mundo le gustaría jugar profesionalmente y tener un contrato. Es una posibilidad en el futuro.”

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