Los Domadores de Cuba se impusieron por barrida (5-0) a la franquicia de los Guerreros mexicanos en su segunda presentación como locales en el Coliseo de la Ciudad Deportiva. Este resultado les aseguró un puesto para la próxima fase de la IV Serie Mundial de Boxeo (WSB), faltando todavía varios matches eliminatorios por efectuar. Ahora los púgiles de la isla acumulan balance de 26 triunfos y apenas cuatro reveses, y con 18 puntos se mantienen como líderes del grupo B.
Otra vez las trompetas escapadas de los estadios de béisbol se hicieron sentir en las gradas del Coliseo, así como algún que otro chiflido acompañante del paso de las modelos que anunciaron el comienzo de los rounds. El opening de la velada estuvo a cargo de la cantante Laritza Bacallao, que a ritmo de “carnaval y tambores” dejó la escena lista para la sexta victoria consecutiva del team dirigido por Rolando Acebal.
En el combate que dio inicio al cartel Gerardo “el Gallo” Cervantes (52kg) superó a Orlando Huitzil por decisión unánime 3-0 (50-45, 49-46, 50-45). El avileño sacó provecho de los constantes intercambios que signaron los cinco asaltos, pegó más y con mayor efectividad. Su trabajo con la mano izquierda, de manera particular los ganchos dirigidos al abdomen de Huitzil, fue exquisito. “En esta, mi tercera pelea, me sentí bien…un poco agotado al final porque el mexicano era muy fuerte, pero ya lo conocía de la preparación previa a la WSB cuando celebramos varios sparrings”, afirmó Cervantes.
Intermitente y confiado, calificativos ideales para describir el accionar de Lázaro “el Príncipe” Álvarez (56kg). Después de un primer round resuelto a su favor sin mucho desgaste, alternó asaltos mediocres con otros donde hizo gala de su excepcional maestría. Al final se llevó el veredicto 3-0 (48-47, 49-46, 48-47) ante Raúl Curiel, púgil de 18 años que validó su condición de subtitular universal juvenil, ofreciendo una tenaz resistencia al pinareño. Este resultó el tercer triunfo de Álvarez, que igualó con Yosbani Veitía (49kg) y Erislandy Savón (91kg) como los máximos ganadores de la armada caribeña hasta la fecha.
Una herida en el arco superciliar izquierdo del mexicano Héctor Reyes sentenció la victoria por TKO del monarca olímpico de Londres 2012, Roniel “el Imparable” Iglesias (69kg), en su estreno en la Serie Mundial. Durante los cuatro rounds en los que hubo acción sobre el ring, Roniel golpeó preciso y de manera constante a su rival, que nada pudo hacer ante la efectividad de los ganchos y rectos lanzados por el pinareño. “Todavía no he adquirido la forma óptima, el contrario de hoy no era de la mayor calidad así que debo seguir mejorando. Igual me encuentro listo para asumir los nuevos retos”, comentó.
Otro que debutó en la WSB fue Enmanuel “el Profeta” Reyes (81kg), sustituto del estelar Julio César la Cruz, que continúa recuperándose satisfactoriamente de la herida recibida en un intento de asalto. El capitalino cumplió al imponerse 3-0 (48-47, 49-46, 49-46) ante el refuerzo moldavo Pietru Siobanu. “Me dieron la oportunidad de suplir a un gran compañero y supe aprovecharla. Me sentí confiado en el ring gracias al apoyo de este hermoso público, lo cual les agradezco”, señaló Reyes.
Ávido por dejar atrás el recuerdo de la derrota sufrida en su primera presentación en la WSB, José Ángel “la Pantera” Larduet (+91kg) le dio una paliza al puertorriqueño Gerardo Bisbal, el otro refuerzo que trajeron los Guerreros a La Habana. Las tarjetas de los jueces resultaron una señal inequívoca de lo acontecido sobre el encerado (50-43, 50-43, 50-44). Victoria fácil ante un rival que, desde el segundo round, se mostró extenuado físicamente y se contentó con aguantar de manera estoica la andanada de golpes que le recetó el santiaguero.
Los cinco triunfos alcanzados ayer por la armada cubana completaron la barrida (10-0) frente a la selección mexicana. El próximo duelo de los Domadores está pactado para el 31 de enero ante los Húsares de Polonia, también en el Coliseo de la Ciudad Deportiva.
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