El popular equipo Industriales cambió de vida este domingo. Ninguno de los tres Gourriel estuvo en la alineación al comenzar en el oriente la última parada del tortuoso camino de la 55 Serie Nacional. Por supuesto nadie esperaba en Holguín al emblemático jugador de la pelota cubana, Yulieski Gourriel que, convoyado por su hermano menor, Lourdes Junior, sorprendió con su fuga de hace una semana en Santo Domingo.
La Serie del Caribe sería su último viaje oficial con una delegación cubana, de la que varias veces fue abanderado, y el comienzo de uno nuevo, extraoficial, hacia el mercado ligamayorista ,en medio de una ola de reacciones diversas tras la difusión de una nota oficial que confirmaba “el abandono” del equipo por los dos atletas “en franca actitud de entrega a los mercaderes del béisbol rentado y profesional”; un comunicado que a diferencia de otros momentos, no usó los términos “traidores” o “ desertores”.
En 2013 habían dejado su elenco Sancti Spíritus por el de Industriales de Lázaro Vargas, y fijaban residencia en La Habana.
Los ojos estaban fijos ahora en Yunieski .Pero tampoco apareció en los jardines del parque “Calixto García” y los Leones de La Habana fueron masacrados en el doble juego del 14 de febrero, cuando sus seguidores estaban esperanzados de que se repondrían de la huida de los jugadores espirituanos en este tramo clave del campeonato.
Un miembro de la selección capitalina, que pidió reservara su nombre, dijo a OnCuba que el outfielder, que también se desempeña en una liga profesional canadiense con los Capitales de Quebec desde hace dos temporadas, le había solicitado “unos días” a la dirección de los Azules.
Según el periódico Escambray, en su edición digital del 8 de febrero, el mayor de los Gourriel les había asegurado que viajaría a su provincia este fin de semana cuando se reanudaba el calendario. “Yo voy a seguir jugando con Industriales”, aseveró Yunieski, vía telefónica, según citó la publicación a la que declaró que se había enterado al igual que su familia “por la misma vía de todo el mundo”, de la decisión de sus hermanos.
La alineación con la que se había hecho ilusiones se le ha desmerengado al mentor Javier Méndez y a pesar de ello, no parece querer excusas en sus actuaciones. Porque, además, también salió del país, legalmente, hace 10 días, otro joven jardinero, regular en la plantilla: Hasuan Viera, a quien algunos situaban en la perspectiva, capaz de suplir al toletero Alexander Malleta. Y resulta que ya está buscando evaluadores de talentos. O lo están buscando a él.
El éxodo silencioso se extiende a los capitalinos más bisoños. El caso más reciente es el de Lázaro Armenteros, 16 años, 6 pies y 205 libras, convertido quizás en el prospecto salido de la Isla de menos edad. Está a punto de ser firmado por un club de las Grandes Ligas estadounidenses.
Hace nueve meses, después de causar sensación en el torneo mundial menores de 15 años en México, salió desde La Habana con rumbo a Moscú de la mano de un familiar. Hoy se ha establecido en Haití. Con la ruta de Ecuador restringida, Haití se presenta como una escala preferida hacia la Gran Carpa.
Bravos, Cubs, Dodgers, Gigantes, Padres y Phillies son algunos de los nueve equipos interesados en firmar a este adolescente habanero, según fuentes del negocio, tras su exhibición en un campo de San Pedro de Macoris, República Dominicana, hace unos días.
Tras la divulgación de la escueta nota sobre la fuga de los hermanos Gourriel los principales medios cubanos se han desmarcado de la saga que continúa en la mira de la prensa internacional al considerarla la deserción más sonada del deporte isleño en estos albores del siglo XXI que en 2015 vio partir a 150 jugadores, muchos de la capital.
La reforma migratoria, aplaudida por todos los cubanos, ha vuelto, de carambola, a dar un toque de atención sobre los contratos diseñados por las autoridades locales en el ámbito deportivo nacional y desnudado la lentitud del proceso de los fichajes en el exterior que en el caso del béisbol parece que se va a extrainning retardado además por la espera de cláusulas y permisos especiales de los Estados Unidos.
Los Gourriel apostaron por la fuga mientras Alexei Bell decidía retornar de Canadá, renunciar a jugar con Santiago de Cuba, y salir legalmente en su aventura hacia la Gran Carpa. Ellos sabrán. Time is gold.