De las 30 franquicias de la NBA, 29 han dado el visto bueno para que la liga le estreche su mano a Cuba. Solo Miami Heat se ha bajado del carro. No quiere entrar en zalamerías con la Isla y sus directivos le han cerrado la persiana a la maravillosa idea que se realizará del 23 al 26 de abril cuando ex estrellas, entrenadores, árbitros y ejecutivos de la NBA aterricen en La Habana para impartir talleres y clínicas profesionales sobre baloncesto.
Los directivos del Heat se molestaron con la decisión y especialmente, dicen, porque se enteraron por la prensa del evento que planea realizar la liga madre del baloncesto profesional de Estados Unidos.
Ni Micky Arison, propietario de la franquicia floridana ni el mismísimo Pat Riley, presidente del club, han dado declaraciones públicas pero sí se han negado a comparecer ante los micrófonos una vez que sus intenciones han sido comunicadas a las más altas esferas de la NBA.
Según el portal Yahoo News, uno de los voceros del club expresó: “La NBA nunca consultó con nosotros. Esto se llevó a cabo de forma unilateral. En el momento en que nos enteramos manifestamos nuestra vehemente objeción a la oficina de la liga. Ni el Heat ni ningún miembro de su personal estarán participando”.
Tras el deshielo de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos después del 17 de diciembre pasado, la NBA ha querido expandirse como señal de crecimiento de su marca global. En ese sentido un sector de la población cubanoamericana de Miami “no ha digerido con beneplácito” la aproximación entre las naciones, lo que indiscutiblemente está relacionado con la postura del Heat en este caso.
Por su parte, hasta el momento la NBA ni se ha perturbado por la declinación de Miami y aún no ha emitido ningún comunicado oficial.
La gran cantidad de inmigrantes cubanos en Miami han hecho del Heat el plantel de baloncesto más seguido en Cuba. Sus dos coronas en los últimos tres años en la NBA han puesto a caminar por las calles de la Isla a camisetas de Bosch, Wade y sobretodo, del que fuera rey de Miami, Lebron James.