Petición en el béisbol cubano, ¿refuerzos o debilitadores?

 

La clasificatoria de la Serie Nacional terminará dentro de poco, y entonces ocho directores volverán a la siempre deslucida ceremonia de petición de los refuerzos (deslucida por la escenografía y los conductores y el guión y las modelos y el vestuario y otras hierbas).

Vamos directo al pollo del arroz. Con la crisis de figuras que vive el campeonato, los equipos cada vez tienen menos peloteros capaces que aportar. La pregunta se cae de la mata: si elencos como Pinar del Río e Industriales cuentan con poca calidad en sus filas, ¿qué quedará para los otros?

Un repaso a las posiciones deja claro que algunas escuadras tienen pie y medio fuera de los boletos a la segunda etapa. Son los casos de Mayabeque, Camagüey y Artemisa. Y que otras como Santiago de Cuba, Holguín, Guantánamo y Cienfuegos, deberán pasar el Niágara en bicicleta (china por demás) para acceder a dicha instancia.

Es decir, que el panorama está prácticamente definido. Ciego de Ávila, Industriales, Pinar, Granma, Las Tunas y Matanzas gozan de opciones abundantes para sobrevivir a la eliminatoria, y las otras dos plazas serían repartidas en la puja que sostienen Sancti Spíritus, Villa Clara e Isla de la Juventud.

El día de la elección de los refuerzos, cada manager tendrá que incorporar cinco figuras a su tropa. O sea, que serían 40 refuerzos en total. Entonces una nueva pregunta se cae –oh Sir Isaac- de la célebre mata: ¿existen en las peores novenas del país 40 peloteros aptos para ayudar realmente a la causa de los clasificados?

Por más que busco, no encuentro. Miro y miro en los rosters de los probables eliminados y la cuenta no me da. Refuerzos, lo que se dice refuerzos, hay a lo sumo unos 30. Y eso, sin pasarme de exigente.

Digamos, lo que más necesita todo el mundo son pitchers. Y la lista de los que pueden ayudar aunque sea medianamente es reducida, encabezada por los derechos Miguel Lahera y Alberto Bicet. La relación cuenta además con Danny Betancourt, Ulfrido García, Yusmel Velázquez, Pedro Agüero, Frank Navarro, José Ángel García, Israel Sánchez Cuesta, Walnier Osorio, Frank Madán, Leorisbel Sánchez, Yasmany Insua y el veteranísimo Norberto González, de regreso tras varias temporadas en el béisbol italiano.

Como ve, hay pocas perlas en el saco. Y la situación no es muy diferente cuando volvemos la vista hacia los jugadores de posición, entre los que se yerguen Yunior Paumier, Edilse Silva, Yordan Manduley, Reutilio Hurtado y el sorprendente Yohandry Urgellés, protagonista de un asombroso comeback.

Otros que pueden aspirar a vestir nuevos uniformes son Héctor Hernández, Pedro Poll, Julio Pablo Martínez, Danger Guerrero, Dairon Blanco, Andrés Reyna, Yusniel Ibáñez, Michel Gorguet, Yeison Pacheco, Adir Ferrán, Giorbis Duvergel, Leonelkys Escalante, Yoel Mestre y los dos Juan Miguel de Cienfuegos, Vázquez y Soriano.

Después de revisar los principales candidatos, no queda más alternativa que compadecerse de los pobres directores que, forzados a sumar hombres a sus filas, deberán devanarse los sesos para encontrar la clásica aguja en el pajar.

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