Mi pregunta del título se responde con sí rotundo. Alfredo Rodríguez llegará a las Grandes Ligas, lo que no significa que tenga asegurado brillar. Pero contando que ese es el sueño por el que se desviven miles de beisbolistas en el mundo, el campo corto está en un territorio privilegiado.
Muchos se rieron cuando lo ubiqué en el número 25 de la lista de prospectos cubanos en 2015. Algunos hasta dijeron: “¿Y ese quién es?”.
Alfredo se encargó de responderles un mes después, con un doble para sepultar a Industriales (el equipo de su provincia) en el Latino y con su actuación en los playoff donde se divertía con astucia en cada juego con la novena de la Isla de la Juventud.
Él reúne herramientas bien valoradas en el béisbol moderno como la velocidad, el guante y el brazo. Los mismos instrumentos que hacen, hoy en día, a los equipos ganar (Kansas City Royals).
“He trabajado mucho en los entrenamientos enfrentándome bastante a los lanzadores y viendo muchos pitcheos. Así, cuando voy al juego me sorprenden muy poco los lanzamientos. Creo que ahí está el éxito”, le dijo Rodríguez en exclusiva a OnCuba en respuesta a la pregunta sobre si estaba trabajando en la discriminación de la zona de strike.
Los evaluadores de la revista Baseball America sitúan al habanero de 21 años a punto de firmar contrato con un equipo de Grandes Ligas. Ha sido interés desde meses atrás de los evaluadores de los Rojos de Cincinnati. “Todo parece indicar que los Rojos son los que me pueden firmar, pero no hay nada concreto todavía, hay que esperar”, aseguró.
Muchos scouts ubican a Alfredo Rodriguez como un fildeador y corredor con perfil de estrella, mientras las interrogantes brotan de su bate. Sin embargo, ha trabajado con su contacto y poder, lo cual produciría un salto de calidad comparado con la linea ofensiva (265/301/284) mostrada en su año de novato en Cuba.
“He trabajado mucho en el gimnasio y con algunos ejercicios de fuerza. En el juego he logrado una gran fuerza al bate que me ha impresionado mucho. Mi contacto nunca lo consideré malo, ahora lo he pulido mejor y gracias a eso y a la ayuda de mi entrenador Javier, he logrado mejorar muchísimo en el plato”, confirmó Rodríguez.
En este mismo mes de enero Alfredo espera ser agente libre. “Me dicen que de este mes no pasa. Yo espero que sí me llegue ya”. El novato del año en Cuba, temporada 2014-2015, ha dejado demostraciones de su imparable poderío defensivo y espera firmar cuando sea el momento.
Su contrato deberá ajustarse restricciones pues no rebasa los 23 años ni las cinco Series Nacionales. Con tantos equipos fuera de la lucha por firmar prospectos internacionales tras cumplir penalizaciones, los expertos estiman que para el caso de Rodríguez sería mejor ser contratado luego del 2 de julio del 2016. Así muchos equipos habrían cumplido sus castigos y esto brindaría más posibilidades y opciones en el futuro contrato del parador corto.
“Te diré que yo firmaré cuando Dios quiera. No importa si es ahora o en julio. Creo que el equipo cuando quiere firmarte y está interesado, da el dinero que sea por el pelotero, así que en eso no tengo problema. Que llegue el día que llegue; estoy preparado para cualquier día. Voy a seguir entrenando fuerte y preparándome bien”, afirmó.
Alfredo Rodríguez presenta interrogantes en su parte ofensiva. Tendrá tiempo en las menores para corregir y perfeccionar su talento. Si logra hacerlo, podrá convertirse en todo un jugador de Grandes Ligas.
¿Quién recuerda a… José Canseco?
Nació en La Habana el 2 de julio de 1964. Fue drafteado por los Atléticos de Oakland en 1982, en la ronda 15 y debutó en Grandes Ligas el 2 de septiembre de 1985 con 21 años. Fue novato del año en la temporada de 1986, al pegar 33 jonrones e impulsar 117 carreras.
Ganó dos anillos de Serie Mundial: el primero con Oakland en 1988, mismo año donde fue en MVP de la Liga Americana; y el otro, en el ocaso de su carrera con los Yankees en 2000, cuando solo tuvo una vez al bate. En 1988 se convirtió en el primer jugador miembro del club 40-40 en una temporada (42 jonrones y 40 bases robadas).
También fue conocido como “The Chemist” el químico, por su relación directa con los esteroides. Incluso Canseco reconoció haber usado drogas en 2005 junto a otros compañeros. Su personalidad traspasó lo pintoresco. Recordado por su participación en un capítulo de los Simpsons, como sus incursiones en las artes marciales y el boxeo. En el 2012 quiso volver a la MLB y jugó en la Liga Mexicana con los Tigres de Quintana Roo y luego de un juego pre-temporada en el que bateó de 5-2, le pidieron someterse a un examen anti-doping y Canseco se negó. Bateó en 12 campañas más de 20 jonrones, en ocho más 30, y en tres ocasiones más de 40 cuadrangulares. En seis temporadas produjo más de 100 carreras y fue cuatro veces bate de plata.
Acumuló un WAR (Victorias sobre el reemplazo) de 42.3 en su carrera, ineficiente para optar por un asiento en Cooperstown.
El jugador cubano de la semana: Leonys Martín. Es líder en la actual ronda de Playoff (Round Robin) de anotadas (7), quinto en OBP (395) y bases recorridas (13) y segundo en hits (10). Ha ayudado a los Tigres del Licey ha eslabonar una increíble racha de ocho victorias en la Liga Invernal Dominicana.
Lo más negativo: La Serie Nacional de béisbol ha añadido una nueva interrupción a su temporada. Esta sería la cuarta parada de la liga Cubana, contando Premier 12, final de año, la jornada Cuba-Holanda y la Serie del Caribe en febrero. ¿Qué liga en el mundo puede darse el lujo de parar cuatro ocasiones?
El dilema: Muchos reportes y rumores ubican a Jorge Soler fue de la órbita de los Chicago Cubs. La casa de proyecciones Steamer lo ubica pegando 18 jonrones en el 2016. ¿Podrá Soler superar esa proyección?
Lo extraño pero real: A pesar de lanzar poco tiempo en la Liga Colombiana, tres cubanos fueron llamados como refuerzos para la siguiente ronda. Fueron ellos Miguel Lahera (Caimanes), Alain Sánchez (Leones) y Alberto Bicet (Toros de Sincelejo).
La frase: “Estoy preparándome para eso, para jugar todos los juegos y ayudar al equipo de Boston. Simplemente trato de trabajar las cosas en que tengo dificultad, para seguir teniendo resultados. Me ayudó jugar aquí el año pasado y siempre se lo agradezco al equipo y a Álex Cora por traerme aquí. Me ayudó mucho en el ‘spring training’, me preparé bien, y fue una base de entrenamiento que tuve para arrancar bien”, le dijo al diario El Nuevo Día Rusney Castillo tras su decisión de jugar el Round Robin con los Criollos de Caguas en la actual Liga Invernal de Puerto Rico.
