Preolímpico de voleibol: Alemania disparada y Cuba con dos finales

Contra todo pronóstico, los alemanes han derrotado a los principales rivales del grupo y tienen pie en París. A Cuba le quedan dos finales.

El alemán György Grozer ha sido la gran estrella del Preolímpico de Brasil. Foto: Volleyball World.

Hay en Hungría un fabricante de arcos tradicionales, de los que usaban los guerreros magiares sobre sus caballos, hechos de madera y cuero con inserciones de asta de toro. Son los arcos Grozer. György nació en Budapest, pero es el arma medieval con la que Alemania ha aniquilado a todos sus enemigos en el grupo A del torneo preolímpico de voleibol rumbo a París 2024. No tiene 500 años, como los arcos; en noviembre cumple 39. Pertrechado en su torre, que es la zona 2 de la cancha, György Grozer lanza una flecha tras otra. Ya los rivales no saben si él es el arquero o si sus 2.00 metros y 130 kg son el arco.  

Los contrincantes están más tensos que su propio cuerpo cuando dispara: comenzó el campeonato con 23 puntos frente a Irán para luego liquidar a Cuba con 24 cartones. El mismo terror de la clasificatoria a Londres 2012, cuando la escuadra antillana cayó en 5 sets contra los germanos en la disputa del boleto a la capital británica. Ahí un joven Grozer fue decisivo en el tie break, y de sus manos salió el último punto que cosió la agonía criolla.

Como hace 11 años, Cuba volvía a salir como favorito ante unos europeos que tuvieron un discreto ciclo y terminaron en el sótano en la Liga de Naciones (VNL) del presente año. El equipo de la isla llegaba de barrer a una Ucrania que avanzó a cuartos de final en el último Eurovoley, y comenzó el primer set ante el águila negra, como mismo había arrancado ante la ex república soviética. Pero volvieron el opuesto y su fiel ayudante de esta campaña: el atacador central de 24 años, Anton Brehme. Y 4 sets fueron suficientes para que explotara el grupo.

Jesús Herrera ha tenido un rendimiento inestable en el Preolímpico. Foto: FIVB

Lo que parecía otro bloqueo mental de Cuba ante su némesis olímpica se hizo golpe material cuando los teutones derrotaron por 3-1 a Brasil y a Italia de manera consecutiva, con Grozer con 27 y 31 puntos, respectivamente. Todo el mundo de hielo. Así también le dicen a Grozer: “Ice Man”. No hay nada igual en el resto de los grupos. Promedia 26.5 por partido, con una eficiencia de 53.94 %. Líder anotador global: le saca 22 unidades al belga Ferre Reggers en la misma cantidad de juegos y en ataque la diferencia es de 14: 89 por 75 del propio Reggers.

Su entrenador, el polaco Michal Winiarski, es solo 13 meses mayor que él. Coincidieron en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, cada uno con su país, y ahora irán juntos a Francia contra todo pronóstico, porque Alemania será líder a falta de tres jornadas y un cierre de calendario cómodo con República Checa, Qatar y Ucrania.

Por su parte, Cuba, después del golpe frente a los teutones, tuvo un inicio de juego impreciso con República Checa. Con el set 23-21 a favor de los europeos, su opuesto Sotola falló un ataque fácil que se convirtió en el punto de viraje del choque: 3-0 ganarían los de la mayor de las Antillas con una ofensiva bien repartida por Liván Taboada, pasador titular en ese juego por la torcedura de tobillo de Christian Thondike en el match de Alemania.

El partido contra los checos supuso la recuperación del opuesto Jesús Herrera, por debajo ante el bloqueo alemán y del que nuestro combinado depende en demasía. Si algo demostró ese encuentro es que no hay sustituto para el zurdo de Artemisa el día que venga mal. Miguel David Gutiérrez sigue lejos de su mejor nivel y el tiempo que entró en cancha apenas se notó. ¿Será posible mover al atacador auxiliar Marlon Yant de posición en caso de otra emergencia en los choques fundamentales contra Brasil e Italia?

El entrenador Jesús Cruz ha dado un nuevo aire al equipo cubano. Foto: Volleuball World.

La barrida de la jornada de ayer versus Qatar, el rival más débil del emparejado, combinada con la ya mencionada victoria de Alemania a Italia y los agónicos triunfos de Brasil frente a los ucranianos y checos en 5 sets, coloca a Cuba con opciones de clasificación directa sin depender de nadie. Ahora están en segundo puesto por haber perdido un set menos que los transalpinos, a pesar de contar con los mismos puntos y el mismo balance de victorias y derrotas. La cuestión es que a los antillanos les falta lo que pudiéramos llamar la fase final del evento (aunque es un todo contra todos), con duelos ante Brasil, Italia e Irán.

A este tramo decisivo Brasil llega con dos unidades menos. Localidad e historia han rescatado momentáneamente a una selección que ha perdido los colores verdes y amarillos de a poco hasta quedarse casi en gris. La ausencia del cubano Yoandy Leal ha disminuido su poderío ofensivo al no tener Lucarelli otro atacador auxiliar que lo acompañe de buena manera.

Por tanto, la escuadra nacional depende de sí misma para regresar a unos Juegos Olímpicos ocho años después. Para ello cuentan con un Miguel Ángel López con su mejor desempeño con Cuba en mucho tiempo: líder anotador con 48 puntos, más de 50 % de efectividad en ataque y ocho unidades con el servicio; el central Javier Concepción entre los máximos bloqueadores del certamen con 12; y un Marlon Yant también con buenos por cientos en ataque y saque.

La acertada distribución de Thondike, junto a una mejora tanto en bloqueo como en ataque de Roami Alonso, quizá el punto más bajo de todo el preolímpico, nos coloca en condiciones de derrotar a Brasil y luchar hasta el final contra una Italia que no ha lucido igual que el equipo campeón del mundo en Polonia hace unos años.

Será una final doble, sobre todo para Cuba, que también ha podido dar buen uso al Datavolley, herramienta tecnológica que permite hacer ajustes necesarios en medio de los partidos en dependencia del accionar rival. Justo esta semana fue noticia que el plantel nacional había comenzado a utilizar dicho programa, paso con el que el voleibol cubano salió —o dio un salto—.

Christian Thondike (# 6) ha dejado una grata impresión en el Preolímpico. Foto: Volleyball World.

De no poder clasificar aquí, todavía quedaría la opción del ranking mundial que cierra al final de la VNL 2024. Ahora mismo, Cuba se coloca en el puesto 11, dos unidades por delante de Canadá.

Asimismo, en el grupo B lideran invictos Estados Unidos y Eslovenia, seguidos por Japón y Serbia con 3-1. Los samuráis cayeron sorpresivamente ante Egipto en 5 set. Mientras, en el grupo C la situación está muy cerrada para el último cupo, pues el primer lugar debe ser para Polonia, único invicto de la llave. Canadá ha sorprendido derrotando a Argentina y a Países Bajos y llevando a tie break su duelo frente a los polacos.

La otra sorpresa es Bélgica. Con la combinación de su opuesto Ferrer Reggers y el atacador auxiliar Sam Deroo suman más de 160 puntos entre ambos. Países Bajos, luego de una VNL y Europeo exitosos, se ha desplomado y con un solo triunfo tendrán que apelar al ranking para llegar a París 2024. Apretada también se encuentra Argentina, con balance de 2 y 2.

Habrá en París un arco Grozer de casi 40 años. Un arma medieval de la que esperamos flechas.

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