On Cuba pudo acceder al nuevo protocolo al que debe atenenerse Julián Assange. Rige desde el último sábado 13 de octubre y regula las visitas, el financiamiento y el mantenimiento de la vida de Julián Assange en el edificio ecuatoriano en Londres.
El exjuez español Baltasar Garzón presentó en Ecuador una demanda de la organización WikiLeaks por las medidas. La iniciativa, en la que se menciona como contraparte a las autoridades de la cancillería y de la procuraduría ecuatorianas, busca que no se haga efectivo este protocolo.
La demanda debería ser procesada por la Corte de Garantías Constitucionales del país sudamericano.
Ecuador le exige a Assange que evite la actividad política en línea y que alimente al gato si quiere seguir refugiado en la embajada del país. Se desconoce el nombre del gato de Assange, solo se sabe que usa corbata y que tiene una cuenta de Twitter: @EmbassyCat (el gato de la embajada) donde se refiere a Assange como “mi humano”. El fundador de WikiLeaks le dijo a la embajada ecuatoriana que respetará las reglas.
Catstro and Chenejo on the Granma pic.twitter.com/Y2HtD3ToX5
— Embassy Cat (@EmbassyCat) 29 de noviembre de 2016
Según el diario inglés The Guardian, Ecuador intentó trasladar a Julian Assange a Rusia. El gobierno intentó nombrarlo como consejero político de la embajada de Moscú, pero las autoridades británicas vetaron su estatus.
Assange, vive en la embajada del Reino Unido en Ecuador desde junio de 2012. Se le ha prohibido expresamente actividades que podrían ser “consideradas como políticas o que interfieren con los asuntos internos de otros estados”.
Lenín Moreno ya adelantó en varias ocasiones que vive a Assange como “un problema” que quiere resolver de la manera “más prolija posible”.
Ante la imposibilidad de enviarlo a Rusia, Ecuador ha establecido esta semana un nuevo y estricto conjunto de reglas internas para él, advirtiéndole que evite los comentarios en línea sobre cuestiones políticas. Pero además le ordenó que limpie su baño y cuide mejor a su gato, o corra el riesgo de perder a su mascota primero y su asilo después.
La relación de Assange con las autoridades rusas ha sido objeto de un intenso escrutinio después de las elecciones de 2016 en Estados Unidos, cuando se alega que los espías rusos entregaron a WikiLeaks correos electrónicos filtrados de la campaña presidencial de Hillary Clinton en un intento por ayudar a elegir a su rival, Donald Trump.
Assange negó haber recibido los archivos del gobierno ruso o respaldar la campaña de Trump, a pesar de un creciente cuerpo de evidencia que sugiere que recibió material directamente de la agencia de inteligencia militar de Rusia y coordinó la estrategia de los medios con el hijo de Trump, Donald Trump Jr.
“Es prácticamente un régimen carcelario”, dijo Carlos Poveda, el abogado de Assange en Quito. “Este nuevo régimen va en contra de su dignidad humana básica como asilado”, según Poveda, quien agregó que, desde el lunes, a Assange no se le había restaurado su internet y no había podido leer y entender el memorándum, ya que no había sido traducido del español. El nuevo protocolo dice que volverá a tener conexión a la red.
La embajada de Ecuador le avisó a Assange, además, que no no pagaría por su comida, lavandería o cualquier otro costo relacionado con su estadía desde el 1 de diciembre de 2018 en adelante.
Assange también debe tener chequeos médicos trimestrales y los debe pagar por su cuenta. La embajada “se reservó el derecho de autorizar al personal de seguridad para incautar equipos” o pedir a las autoridades británicas que ingresen a la embajada y lo detengan. Cualquier intento de traer equipos no autorizados a la embajada se informará como una “violación de seguridad y se informará a las autoridades británicas competentes”.