El exabogado personal del presidente Trump, Michael Cohen, dijo que “no está interesado” en un indulto presidencial, y afirmó que Trump enfrentará problemas legales poco después de salir de la Casa Blanca.
El letrado enumeró varias razones: “Tiene que ver con sus finanzas, tiene que ver con sus declaraciones de impuestos, tiene que ver con sus propiedades, tiene que ver con los estados financieros personales que hizo y entregó para obtener préstamos”, dijo Cohen a la CBSN hoy jueves. Varias investigaciones podrían causarle problemas legales a Trump después de que deje el cargo en enero, incluidas las del Congreso, las de los fiscales generales de Nueva York, Washington D.C. y del fiscal de distrito de Manhattan.
Dijo que había sido interrogado por el equipo del fiscal general del estado y la oficina del fiscal de distrito y afirmó que los investigadores están “bien preparados” con sus pruebas para “avanzar relativamente rápido” en sus investigaciones. “Creo que hay una cantidad creciente de pruebas sobre las que se procesarán”, dijo Cohen. “Por supuesto, una parte de ella es civil y otras partes son criminales”.
En 2018 Cohen se declaró culpable de cargos de fraude, violaciones de campaña y de mentirle al Congreso. Fue sentenciado a tres años de prisión, pero a principios de este ano se le concedió el confinamiento en su casa debido a la pandemia.
El presidente Trump ha dicho repetidamente que es un mentiroso, pero Cohen sostiene que tiene en su poder documentos para respaldar sus afirmaciones.
Actualmente solo hay una investigación públicamente conocida que podría implicar cargos penales para Trump, dirigida por el fiscal de distrito de Manhattan, Cyrus Vance Jr. Inicialmente se enfocó en pagos de dinero secreto hechos durante la campaña de 2016 a la estrella de cine porno Stormy Daniels, pero la oficina de Vance la ha ampliado para considerar posibles delitos como el fraude y la evasión fiscal.
Cohen se negó a comentar detalles específicos de lo que le dijo a los investigadores, pero apuntó: “Sé lo que están buscando”, tienen una “multitud de pruebas” acumuladas.
Cuando se le preguntó sobre la mentalidad del presidente, dijo: “Ahora está muy, muy nervioso y muy asustado porque en 27 días sabe que Joe Biden tomará juramento, y ahí es cuando habrá litigios y citaciones que van a volar y que él ya no puede controlar”.
“Cuando empecé a darme cuenta de que Trump y su administración me estaban utilizando como su chivo expiatorio, no quería terminar siendo recordado en la historia como el villano de la historia de Donald Trump”, dijo.
A diferencia de Paul Manafort, Roger Stone y Michael Flynn, entre otros, no ha recibido un indulto del presidente, ni tampoco “esperaba uno”. “Realmente creo que quienes que estaban aceptando la inmundicia de Trump tendrán el hedor de la corrupción después de su nombre y el de sus familias durante las próximas décadas”, dijo. “Es solo otro acto vergonzoso de Trump”.
El presidente comenzó a anunciar varios indultos y conmutaciones el miércoles por la noche. Entre los primeros estaban Flynn, quien se desempeñó brevemente como asesor de seguridad nacional antes de declararse culpable de mentirle al FBI, y el ex miembro del personal de la campaña de Trump, George Papadopoulos. Los indultos para Stone y Manafort se anunciaron la noche siguiente. Los cuatro aliados de Trump, como Cohen, fueron acusados de cargos derivados de la investigación del fiscal especial Robert Mueller.