El presidente Joe Biden condenó este viernes la “epidemia” de las armas y pidió a los republicanos en el Congreso que apoyen los esfuerzos legislativos por contenerla, tras conocerse la muerte del sospechoso de dos tiroteos masivos en Maine.
Biden celebró la noticia de que el presunto autor de estos hechos en la localidad de Lewiston, en los que murieron 18 personas, fuera encontrado muerto y aprovechó para fustigar el acceso indiscriminado a las armas de fuego que propicia la ocurrencia de estos lamentables sucesos.
“Esta noche nos sentimos agradecidos de que Lewiston y las comunidades vecinas están seguras después de pasar días insoportables escondidos en sus casas”, dijo el mandatario en un comunicado, citado por la agencia EFE.
No obstante, apunta la agencia, el principal mensaje del mandatario demócrata fue contra la violencia con armas de fuego.
Biden consideró que los estadounidenses “no deberían tener que vivir de esta manera”.
“De nuevo pido a los republicanos en el Congreso que cumplan con su obligación de mantener seguros a los estadounidenses. Hasta que llegue ese día, seguiré haciendo todo lo que esté en mi mano para poner fin a esta epidemia de violencia con armas de fuego”, dijo.
Americans should not have to live like this. I call on Republicans in Congress to fulfill their obligation to keep Americans safe. And I will continue doing everything in my power to end this gun violence epidemic.
The Lewiston community, and all Americans, deserve nothing less.
— President Biden (@POTUS) October 28, 2023
“Robert Card está muerto”
Este viernes, la policía estatal de Maine confirmó el hallazgo del cuerpo del principal sospechoso de los dos tiroteos ocurridos el miércoles en Lewiston.
Robert Card fue encontrado muerto sobre las 19.45 hora local (00.45 GMT) con una herida de bala autoinfligida en la cabeza y su cuerpo se halló en un lugar cercano al río en el que había abandonado su coche, dos días después de haber perpetrado dos tiroteos en una bolera y un restaurante, informa EFE.
Mike Sauschuck, comisario del Departamento de Seguridad Pública de Maine, informó sobre la muerte de Card en una rueda de prensa en la que participó la gobernadora demócrata, Janet Mills, quien a su vez confirmó que ya le ha dado la noticia al presidente Joe Biden.
El comisario explicó que antes de hacer pública la noticia fueron notificadas las familias de los 18 fallecidos y también la del sospechoso, quienes “perdieron a un ser querido en este escenario”, afirmó.
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Con este hallazgo se pone fin a dos días de tensión en Lewiston y las ciudades vecinas, donde gran parte de los ciudadanos habían permanecido resguardados en casa por seguridad.
Además, termina también así una intensa búsqueda por aire, tierra y agua en la que participaron centenares de efectivos de la policía local, estatal, así como del FBI.
Card, de 40 años, era un instructor certificado y reservista del ejército. Por el momento no se ha informado sobre las posibles motivaciones de los tiroteos.
No se sabía nada del sospechoso desde que el miércoles las autoridades publicaron su fotografía en redes sociales —en la que aparecía portando un rifle de asalto— y pidieron a la población que compartiera cualquier información sobre su posible paradero con la policía.