Los demócratas en la Cámara de Representantes exigieron el jueves al expresidente Donald Trump testificar bajo juramento en su inminente juicio en el Senado. El expresidente, dijeron, debe explicar por qué él y sus abogados han cuestionado denuncias de hechos centrales para el caso.
El pedido de los legisladores pone de manifiesto su intención de presentar un caso agresivo contra el expresidente, aunque ya no esté en la Casa Blanca.
Un asesor de Trump no respondió de inmediato a un pedido de declaraciones sobre la carta de los legisladores.
El juicio en el Senado comienza el 9 de febrero. A Trump se le acusa de incitar a una turba de partidarios que tomaron por asalto el Capitolio el 6 de enero.
En la carta el representante Jamie Raskin, uno de los legisladores acusadores, pide que Trump declare “antes o durante el juicio político en el Senado” y bajo interrogatorio sobre su conducta el 6 de enero, y que lo haga entre el lunes 8 y el jueves 11 de febrero próximos.
Raskin dijo que Trump cuestionó hechos críticos en el caso “a pesar de las pruebas claras y abrumadoras de su infracción constitucional”.
“A la luz de su cuestionamiento de estas denuncias de hechos, lo invito a declarar bajo juramento, sea antes o durante el juicio político el Senado, acerca de su conducta el 6 de enero de 2021”, escribió Raskin.
Añadió que si Trump se niega a declarar, los legisladores acusadores utilizarán su negativa como prueba en su contra en el juicio, argumento similar al empleado por los legisladores demócratas en el juicio del año pasado, cuando muchos funcionarios trumpistas hicieron caso omiso de las órdenes de comparecencia.
“Mientras un presidente en funciones podría presentar el argumento de que se le distrae de sus deberes oficiales, evidentemente eso es inaplicable aquí”, escribió Raskin.
El Senado podría votar para citar a Trump durante el juicio, pero no está claro si habría suficiente apoyo en un Senado dividido en partes iguales. Los senadores republicanos, e incluso algunos demócratas, se opusieron a la idea de pedirle testimonio a Trump.
El senador Ted Cruz (R-Texas) dijo que el esfuerzo tenía como objetivo una “retribución partidista” y “muestra que lo que están buscando es un juicio espectáculo”. El senador Lindsey Graham (R-Carolina del Sur) lo calificó como una “estratagema política” y señaló que la Cámara nunca realizó entrevistas a testigos antes de proceder para acusar a Trump. “Esperan que el Senado haga su trabajo”, agregó el Senador Chuck Grassley (R-Iowa). “No sé por qué tenemos que arreglar las piezas por la insuficiencia de la Cámara de Representantes”.
Algunos demócratas también se opusieron a la idea de solicitar el testimonio de Trump. “Creo que es una idea terrible”, dijo el senador Chris Coons de Delaware, bromeando: “¿Conoce al presidente Trump?” El senador de Virginia Occidental, Joe Manchin, dijo que sería “un espectáculo de perros y ponis”.
Otros demócratas del Senado han sugerido que los testigos no son necesarios para demostrar que Trump merece ser condenado. Pero la condena, que requiere el apoyo de dos tercios de la Cámara, será difícil de vender para los promotores del juicio político, sobre todo después de que 45 senadores republicanos votaron la semana pasada para declarar que llevar a un expresidente a juicio es inconstitucional.
Associated Press/OnCuba.