Miami reduce al mínimo las actividades públicas, impone ley seca y cierre de escuelas e universidades

El alcalde del condado cerró todos los restaurantes y bares indefinidamente. Solo se permite servir comida para la calle. Las concentraciones de más de 10 personas en Miami Beach se vuelven ilegales.

El alcalde Dan Gelber. Foto: Chris O'Meara/AP.

El alcalde del condado Miami-Dade ha decretado el cierre indefinido de restaurantes, bares y cines para evitar la propagación del Coronavirus a partir de las 11 de la noche de este martes. “Esto está encaminado a evitar la propagación del contagio y por ello ordeno el cierre de todos los bares, restaurantes y cafeterías, así como cines, teatros, gimnasios y todos los locales comerciales”, dijo el alcalde en una rueda de prensa. 

La decisión de Giménez se aplica a las varias ciudades que integran el área metropolitana del ‘Gran Miami’ pero en Miami Beach han sido más severas ya que la ciudad ha practicamente cerrado sus puertas y enviado a sus trabajadores y ciudadanos a sus casa. “Esto no es un toque de queda”, advirtió el alcalde Dan Gelber en una rueda de prensa esta mañana.

Así, partir de las cinco de la tarde de este martes también se encuentran cerrados todos los bares, restaurantes, y casinos. Los hoteles y restaurantes solo podrán servir para la calle y –algo inédito– en Miami Beach se prohíbe la concentración de más de diez personas, agregó Gelber. “La policía comenzará por hacer una advertencia, si no se dispersan serán arrestados y multados”, enfatizó. A partir de las 11 de la noche no se podrá circular en las calles de la zona turística de Miami-Beach.

La decisión de la ciudad también es mucho más dura que la advertencia nacional del Centro de Control de Enfermedades, que el lunes limitó las aglomeraciones a cincuenta personas. Este martes, la advertencia bajó a 10 personas.

Como contrapartida, siguen operando gasolineras, hospitales, farmacias, talleres de autos y tiendas de conveniencia, aunque no se podrá vender bebidas alcohólicas.

Esto tendrá como consecuencia inmediata en Miami Beach la suspensión de las diversiones estudiantiles por las vacaciones de primavera. La playa se vaciará. “Los estudiantes se van a casa, no más trasiego en las playas ni concentraciones en la calle. La gente tendrá que entender que esta epidemia tiene consecuencias y debemos proteger a los nuestros. Vayan a casa y cuiden a su familia”, dijo Gelber. Tradicionalmente, durante esta época del año Miami Beach recibe a centenares de miles de personas de toda la Unión.

En Miami, aunque no ha sido anunciado el plan final se supo que ya se han firmado los documentos necesarios para implementar medidas similares. El alcalde de la ciudad, Francis Suárez, se encuentran recluidos en su casa después que le fue diagnosticado el virus y diariamente se comunica con los ciudadanos a través de un mensaje en Youtube donde cuenta de su evolución. Este martes todavía no ha soltado su comunicación. Pero el concejal Manolo Reyes dijo a medios locales que “la orden ya estaba lista y se´ra publicada a más tardar esta tarde. No tomamos esta decisión a la ligera. Sabemos que habrá un impacto económico negativo”.

A su vez, por la mañana, el gobernador del Estado en una corta declaración en la capital del estado, Tallahassee, anunció grandes restricciones para los próximos 15 a 30 días para impedir aglomeraciones también en bares y restaurantes.y el cierre de escuelas y universidades hasta el final del semestre escolar que termina el 30 de abril. Los estudiantes tendrá que seguir estudiando a través de internet. “Se que va a molestar mucho a mucha gente pero en esto tenemos que permanecer juntos”, afirmó Rick DeSantis.

Por la tarde, el gobernador DeSantis hizo algunas precisiones en relación a sus declaraciones matutinas. Siguiendo en sintonía con el presidente Donald Trump, quien horas antes anunció el lanzamiento de un paquete de estimulo económico de 1 billón de dólares para ayudar a resarcir a pequeños negocios y ciudadanos por las pérdidas por la pandemia, el gobernador explicó que el estimulo llegará a Florida y los beneficiarios serán divididos en categorías después de llenar un formulario que será dedicado de inicio a quien se encuentre desplazados de su trabajos o haya sido despedido. Ese subsidio no ultrapasará los 1.000 dólares por persona.

“Hay que tener en cuenta que ni todo el mundo tiene un trabajo que se pueda hacer en casa. Vamos ayudar a esos primero, en un proceso rápido y efectivo porque sino no dará los resultados esperados”, afirmó.

La misma lógica se aplicará en las pruebas de contaminación. Trump también anunció la pronta disponibilidad de módulos de pruebas que serán distribuidos en masa a nivel nacional por hospitales y centros clínicos que los usaran gratuitamente. En Florida, el gobernador establecerá un plan de pruebas volantes, o sea, los pacientes acudirán a lugares previamente señalados, no necesariamente un hospital o clínica, puede ser una farmacia o cuartel de bomberos, donde serán atendidos por prioridades aún por definir.

“Lo primero será el personal médico. Queremos garantizar que nadie está infectado. Después por categorías como enfermedades familiares, síntomas serios, livianos o, sencillamente gente que quiere tranquilizarse. O sea, organizados por grupos de gravedad.

Lo ideal es que nadie espere más de 4 horas para saber el resultado y, estoy pensando pedir ayuda a la Guardia Nacional para ordenar las filas”, reveló DeSantis.

Hasta el momento han fallecido 8 personas en Florida a causa del virus, hay 192 floridanos infectadas, 173 de los cuales en el estado. Los demás está repartidos por el país. El lunes se había 160 casos de infección, lo cual significa que en 24 horas se han incrementado 20%, una de las velocidades de crecimiento más altas de Estados Unidos.

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