Francisco: “La vida humana no es un problema, es un regalo”

En su intervención el papa señaló que el número de nacimientos es el primer indicador de la esperanza de un pueblo, pues “sin niños y jóvenes un país pierde las ganas de futuro”.

Papa Francisco con foro sobre población en Roma. Foto. Prensa Latina

El papa Francisco abogó por políticas eficaces a favor de las familias para enfrentar la grave crisis poblacional durante un discurso este viernes en el evento sobre Estados generales de la natalidad, que sesiona en Roma, resaltó un despacho de la agencia Prensa Latina fechado en la capital italiana.

Son necesarias “opciones valientes, concretas y a largo plazo”, así como “un mayor compromiso de todos los gobiernos”, manifestó el líder religioso en la clausura de la cuarta edición de ese evento.

El foro tiene como objetivo sensibilizar a la opinión pública sobre problemas relacionados con la disminución de la tasa de natalidad.

En su intervención, el Santo Padre señaló que el número de nacimientos es el primer indicador de la esperanza de un pueblo pues “sin niños y jóvenes, un país pierde las ganas de futuro”.

Para ilustrar sus preocupaciones, el Sumo Pontífice colocó el ejemplo de Italia, donde la edad promedio es actualmente de 47 años, mientras que en algunos países de Europa central es de apenas 24.

“Los registros negativos ( más muertes que nacimientos) aumentan y Europa, de ser el denominado Viejo Continente, en la realidad se está transformando cada vez más en un continente viejo cansado y resignado”, evaluó el papa, de 87 años, y con una salud quebrantada.

“La vida humana no es un problema, es un regalo”, expresó, y apuntó que “en la base de la contaminación y del hambre en el mundo no están los niños que nacen, sino las elecciones de quienes solo piensan en sí mismos, el delirio de un materialismo desenfrenado, ciego y rampante”, recogió la noticia elaborada por PL.

Igualmente, se refirió al fenómeno del consumismo como “un virus maligno” que “ socava la existencia de las personas y de la sociedad desde la raíz”, en un mundo donde las armas que matan y los anticonceptivos que impiden la vida son las inversiones que generan más ingresos.

En su intervención, el Santo Padre insistió en la necesidad de promover “una cultura de generosidad y solidaridad intergeneracional para revisar hábitos y estilos de vida, renunciando a lo superfluo para dar a los jóvenes esperanza para el mañana”, al tiempo que pidió no resignarse “a un guión ya escrito por otros”.

El llamamiento papal incluyó una exhortación a cambiar el rumbo de los acontecimientos, pese a vivir en un planeta con baja natalidad, guerras, pandemias y cambio climático.

“No es fácil mantener viva la esperanza, pero no desistáis, tened fe, porque el mañana no es algo inevitable: lo construimos juntos”, manifestó el primer papa latinoamericano y jesuita de la historia.

Una abrumadora mayoría de países del mundo no tendrá tasas de fecundidad suficientemente altas para mantener el tamaño de su población en 2100, según un estudio publicado recientemente en la revista británica The Lancet.

Los investigadores del Instituto de Métricas y Evaluación Sanitarias (IHME) de la Universidad de Washington, en  Estados Unidos, descubrieron, por su parte,  que tres cuartas partes de los países no tendrán tasas de fertilidad lo suficientemente altas como para mantener el tamaño de su población en 2050.

Fechas del Jubileo Ordinario de 2025

Entretanto, el papa llamó a “las naciones más ricas” a “condonar las deuda de los países que nunca podrán saldarlas”.

“Si verdaderamente queremos preparar en el mundo el camino de la paz, esforcémonos por remediar las causas que originan las injusticias, cancelemos las deudas injustas e insolutas y saciemos a los hambrientos”, escribió Francisco en la bula que este jueves oficializó  las fechas del Jubileo Ordinario de 2025.

Se trata de un Año Santo, según la iglesia,  durante el que se espera que lleguen a Roma 32 millones de peregrinos del mundo entero.

Roma se prepara para el Jubileo del 2025

En una bula publicada este jueves, el papa anunció que el Jubileo se iniciará el 24 de diciembre con la apertura de la puerta santa de la Basílica de San Pedro, y finalizará el 6 de enero de 2026.

Los 32 millones de peregrinos se sumarán a los millones de turistas que visitan la capital italiana.

Los jubileos “ordinarios”, que están concebidos por la Iglesia católica como un tiempo de conversión y de penitencia para los fieles, se celebran cada 25 años.

 El último, presidido por Juan Pablo II en el 2000, recibió a 24,5 millones de peregrinos en el Vaticano.

A ese evento se suman jubileos “extraordinarios”, convocados por una razón especial.

El  último tuvo lugar en 2016 con motivo del  aniversario 50 del final del Concilio Vaticano II, que abogaba por una Iglesia más abierta y misericordiosa.

 

 

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