Exoplanetas, tabaco y ron

Foto: Kaloian.

Foto: Kaloian.

Esta semana científicos de la NASA han confirmado el descubrimiento de 7 nuevos planetas más allá del sistema solar (exoplanetas), mientras en Cuba sesiona el Festival Internacional del Habano y la Corporación Havana Club estrena nueva marca: “Tributo 2017”. Los expertos de la NASA responden a las inquietudes de los internautas, mientras en La Habana… veamos qué pasa.

 

Un sistema de planetas

está bastante cercano

a la Tierra, casi a mano,

así que se crean vetas

de esperanza, luces netas

hacia un distinto escenario.

Ese mundo extraordinario,

se halla –hermoso tragaluz–

solo a 40 años luz

de las estrellas de Acuario.

 

Hay Festival del Habano

(el número XIX)

y se pone de relieve

cómo negocia un cubano.

Con un buen puro en la mano

nadie piensa en sus pulmones.

Y en estas celebraciones

(casi siempre en esta fecha)

Havana Club aprovecha

y presenta nuevos rones.

 

 

El Telescopio Espacial

llamado Spitzer (la NASA),

mandó fotos para casa

de un nuevo mundo real.

Todo ha sido excepcional.

Todo se supo enseguida.

Y la gente enfebrecida

quisiera saber tan solo

cuál va a ser el protocolo

si se hallan signos de vida.

 

 

Estos rones “especiales”

son tesoros verdaderos

y los maestros roneros

visten de largo. Geniales,

hay expertos “bebensales”.

Mientras minuto a minuto

la NASA muestra su fruto

de exo-mundos –vieja meta–

Cuba estrena otro planeta:

el Havana Club “Tributo”.

 

 

El Telescopio Espacial

Webb tendrá –y la voz me abrocho–

en el 2018

un lanzamiento otoñal.

Será otra vez especial,

y dará mejor cosecha.

Habrá ya una idea hecha

sobre cómo se va a actuar

mas tendremos que esperar

hasta pasada esa fecha.

 

 

Mientras tanto, a lo cubano,

en nuestras calles inquietas

nadie habla de exoplanetas

ni de un nuevo sol lejano.

Hay Festival del Habano

y nueva marca de ron.

Y los Jefes, en acción

práctica, piensan, muy finos:

“Qué bueno, nuevos destinos

para nuestra exportación”.

 

 

Las atmósferas halladas

no son ricas en oxígeno.

Así que el mundo alienígeno

tendrá que esperar. Cerradas,

las esperanzas creadas

para la exo-vida, pienso,

tendrán que esperar. Inmenso

e histórico el desafío.

Tú confía. Yo confío.

Esto es tan solo el comienzo.

 

 

¿Qué sigue después de esto?

La emoción de descubrir

y anunciar “lo porvenir”

es tentador y molesto.

Publicarlo ha sido un gesto.

Pero, ¿y los próximos pasos?

Después de tantos fracasos

este hallazgo es importante.

Excitante. Estimulante.

Hace el misterio pedazos.

 

 

Havana Tributo. Habanos.

Nuevo sol y exo-planetas.

La NASA y Cuba. Secretas

rutas y mundos lejanos.

Excepto nuestros paisanos,

hay mundial expectación.

Pero en Cuba, al son del son,

nadie piensa en el dios Febo:

“Qué bueno, un mercado nuevo

para el tabaco y el ron”.

 

 

La nave espacial ha estado

monitoreando ese sol

desde diciembre, un control

que mucho nos ha alumbrado

y continuará pasado

marzo. Son más de 70

días de datos. La cuenta

científica sigue activa

es la única alternativa.

Mas la operación es lenta.

 

 

¿Cómo, que llegaron ya

los marcianos? ¡No me jodas!

La Aragón de todas, todas

les hará otro chachachá.

¿Siete planetas? ¡Quién va

a creerse lo que escriben!

Y en las calles se perciben

pequeñas voces indígenas:

“Seguro esos alienígenas

compran, fuman, beben, viven”.

 

 

Ya veremos si al final

somos, tras tanto medir,

capaces de definir

el período orbital

del planeta 7. Igual

vemos una rotación

(llamada igual “reversión”)

de variaciones completas

del tiempo en tránsito, metas

en nuestra investigación.

 

 

¿Planetas nuevos? ¡Qué jeta!

Yo quiero, si alguien se atreve,

un almendrón que me lleve

para algún exoplaneta.

Almendrón, o bicicleta,

o balsa (hay alternativas).

Y sí hay criaturas vivas,

may bróder, tan solo sé

que yo le vendo hasta a ET

una caja de Cohibas.

 

 

Tal vez hallemos planetas

en tránsito, adicionales.

Extraterrestes reales.

No lo sé, mal interpretas

las científicas facetas

y plazos del aparato.

Se investiga todo el rato.

Y, sin miedo al qué-dirán

los datos brutos serán

publicados de inmediato.

 

 

Va a pasar un tiempo antes

de que hallemos un ambiente

rico en oxígeno. Miente

quien lo niegue. Diletantes

no hay en la NASA, farsantes

tampoco tiene la NASA.

Se publica lo que pasa.

Se informa a la población.

Veremos la evolución

de los vecinos de casa.

 

 

¿Exo-qué? ¿Exo-planeta?

¿De éxodo? ¿Y qué cosa es “exo”?

¿Tú no querrás decir “sexo”?

¿”Sexo-planeta”, poeta?

Si es así… ¡ñoooooooo!… Buena meta.

Me apunto. Me voy. Me piro.

¿Sexo-planeta, guajiro?

¿Sexo en un mundo alienígeno?

¡Qué importa que no haya oxígeno!

¡Yo templando ni respiro!

 

 

Y así, mientras todo el mundo

colocaba en primer plano

al nuevo mundo lejano

aquí estaba en el segundo.

Llamé a mi hermano Raimundo

y me respondió: “Poeta,

Deja esa muela indiscreta,

bebe ron y sé feliz.

Cuba es un exo-país

en vez de un exoplaneta.

Salir de la versión móvil