Los diplomáticos sordos

Foto: Kaloian.

Foto: Kaloian.

Cuba y Estados Unidos

llevan medio siglo en guerra.

Medio siglo y no se cierra

la crisis. Tan divididos

estamos, tan malheridos,

lo vemos tan natural,

tan lógica, tan normal

(como un tísico la tisis)

que cuando no hay una crisis

hasta nos sentimos mal.

 

 

Parece telenovela.

“Crisis”, ¡nueva temporada!

Una novela seriada

que engancha, vicia y desvela

(al niño, al viejo, a la abuela).

Crisis. Siempre el mismo título.

Crisis, con y sin subtítulo.

Más allá de Irma y de ISIS,

Vamos, que regresa “Crisis”,

¡“Crisis”, último capítulo!

 

 

Crisis. Y la tierra suda.

Crisis. Y el caimán revuelto.

Crisis. ¿Algún cable suelto?

Crisis. Respuesta barbuda.

Crisis. Yo dudo y él duda.

Crisis. Nosotros dudamos.

Crisis. ¿Pero a dónde vamos?

Crisis. Qué chisme, qué enredo.

Crisis. ¿Quién ha dicho miedo?

Crisis. Ya nos adaptamos.

 

 

Los Misiles. El Mariel.

Los Balseros. Eliancito.

Partes de un filme infinito

tan largo como tan cruel.

Alguna hasta en el papel

parece prefabricada.

Y ahora hay nueva temporada.

Se está “rodando” hace días

una de micros y espías:

“La Crisis de la Embajada”.

 

 

Crisis. Aprietos. Conflicto.

Apuros. Dificultades.

Mentiras contra verdades.

Pleitos contra veredicto.

Y uno se hace casi adicto

a las atribulaciones.

Son varias generaciones

rodeadas de paroxismo,

espionaje, nerviosismo,

chismes y especulaciones.

 

 

Hace dos años Obama

Y Raúl (momento histórico)

abrieron (el pueblo eufórico)

dos embajadas. Sub-trama

política de una trama

de difícil solución.

Pero llegó Donald Trump

y en pocos meses deshizo

el pacto, aún resbaladizo,

de la normalización.

 

 

Se abrieron las embajadas.

Diplomáticas Misiones.

Mutuas representaciones.

Acciones “normalizadas”.

Pero aquellas marejadas

tranquilas duraron poco.

Y otra vez: ¡Que viene el Coco!

¡Se acabó lo que se daba!

¿Volveremos al Plan Jaba?

¿Vamos marcha atrás? ¡Qué loco!

 

 

Trump habla de “alta frecuencia”

y canal de transmisión

de alta gama y afección

acústica y penitencia

por falta de transparencia

y funcionarios heridos

porque fueron “agredidos”

por algún rayo invisible

que hace todo lo posible

por taladrar los oídos.

 

 

¡Candelaaaaaaaa!, dijo mi madre

cuando escuchó la noticia.

Vaya chisme, qué injusticia,

dijo Lola, su comadre.

¡Candelaaaaaaaa!, repitió el padre

de Lola, un viejo barbero.

Y el señor del Noticiero

puso cara de prepárense

y luego cara de párense

y luego cara de pero…

 

 

La Crisis de la Embajada

tiene alto rating de audiencia

(aunque no en “alta frecuencia”,

porque aquí en alta no hay nada).

La gente está preocupada.

Hay tensión en el ambiente.

Y para ver lo que siente

sobre este enredo el cubano

salí, grabadora en mano,

a entrevista a la gente.

 

 

UN ASERE ILUSTRADO

 

-¿Ataque sónico, acústico?

¿Armas con alta frecuencia?

¿Qué volá, asere?, ¿la ciencia

ahora lleva un toque rústico?

¿Nos quieren meter un “sústico”?

¿esto es trans-conspiración?

Yénica, aquí ni James Bond

tendría velocidad

para espiar de verdad.

Coméntaselo a James Trump.

 

 

UN HUMORISTA AFICIONADO

 

-A mí el rubio del tupé

me parece un humorista

excepcional, un artista

extraclase. ¿Donald qué?

¿Trump, Tramp, Tromp, Trimp, Tremp? No sé,

pero no importa, es buenísimo.

Y tiene un humor finísimo.

Chiste de los gordos-gordos

Eso de los yumas sordos

por un rayo… ¡Comiquísimooooo!

 

UN BORRACHO

 

Hip… ¿qué hay yumas con sordera?

Hip… ¿un rayo? ¿ultrasonido?

Hip… ¿y quién es el marido?

Hip… ¡coño, qué borrachera!

Hip… ¿Los yumas? Jodedera.

Hip… ¡fui yo! ¡Qué hacen por eso!

Hip… ¡Que me… hip…  metan preso!

Que la SINA me deporte.

Hip… que me manden pal norte…

Me meto un whisky… y regreso.

 

UN BARRENDERO

Oye, yo no creo nada.

Yo barro ahí todos los días

Y puedo dar garantías

De… no sé… en cada jornada

se oye música grabada

(salsa, hip-hop, reguetón).

Y barro alguna canción

Directo pa’ la basura.

¿Pero sordos? ¡Qué locura!

¿Qué le habrán echado al ron?

 

 

UN POETA CALLEJERO

A mí me bajan las musas

cuando estoy solo y tranquilo,

bajan colgadas de un hilo

invisible, con difusas

y abstractas hipotenusas,

cargadas de fantasías.

Por eso hago poesías,

poemas de “alta frecuencia”.

Así que (por transparencia)

¿no serán las musas mías?

 

UN NOVELISTA DE CIENCIA FICCIÓN

Ay, qué buen tema. Qué trama.

A quién se le habrá ocurrido.

Yo le hubiera hasta metido,

no sé, un robot y un programa

informático de gama

ultrafina, archipatético.

Un viejo radio soviético

con software chino y antena

parabólica. Qué pena.

Me parece hasta poético.

 

UN NOVELISTA POLICIACO

Buena trama de espionaje

y de contrainteligencia.

“Ataques de alta frecuencia”.

Buen título. Alto voltaje.

Yo pondría un personaje

de una estética ochentera.

Elpidio Bond. Ya quisiera

esta trama Sthepen King.

Voy a escribirla yo. Al fin

comenzará mi carrera.

 

UN REVENDEDOR DE TARJETAS DE WIFI

Broder, yo vendo tarjetas,

pero no sé nada de eso.

¿Tas loco? ¡Me meten preso!

¿Transmisión de ondas secretas?

¡Los yumas, que son macetas,

que metan pa’ CSI…

que investiguen por ahí,

Tras la huella y esas cosas…

Yo en tramas tan peligrosas

no me meto… ¿ya? ¡Me fui!

 

UNA SANTERA

Eso son cosas de Orula,

castigos del más allá.

Si están sordos… ¡siá cará…!

La Yuma no nos calcula.

Olofi… Changó… ¡Circula!

Ochosi…  Eleggüa… ¿Sonora?

¿Crisis acústica ahora?

¿Sónica o como se diga?

Eso es que Orula castiga.

¡Aché pa’ ti…! ¡Voy embora!

 

UN OTORRINOLARINGÓLOGO

Muy buenos días, yo soy

otorrinolaringólogo

y no les haré un monólogo

sobre lo que pasa hoy.

Yo solamente les doy

mi opinión autorizada.

Es muy rara esta cruzada

que se ha vuelto un pleito gordo.

¡Que venga a consulta un sordo

de ellos…! ¡Si no cuesta nada!

 

 

UN CINEASTA

Quien escribió este guion

de extraños ataques sónicos

y aparatos supersónicos

ve mucha ciencia ficción.

¡Bróder, si la conexión

aquí es casi incidental!

Si el wifi conecta mal

y todo es siempre emergencia.

¿Qué es eso de “alta frecuencia”?

¡Hollywood está fatal!

 

UN GUAJIRO

Mira, a mí lo del sonido

y la alta frecuencia esa,

ni lo sé ni me interesa,

ni le comprendo el sentido.

A mí lo que me ha dolido

es que quiten el visado.

Cinco años he esperado

y ahora que ya me tocaba

de nuevo el juego se traba

y yo me quedo embarcado.

 

Tanta es mi rabia y mi queja

que si agarro a Donald Trump

queda sordo del trompón

que le meto por la oreja.

Mi frecuencia sí es pareja,

Y “alta frecuencia”, tan loca

que si se acerca y le toca

sabrá sin afecto acústico

cómo saca un puño rústico

el tímpano por la boca.

 

UNA SEÑORA MAYOR (QUE NO QUISO DECIR NOMBRE NI OFICIO)

Si los yumas se enfermaron

de sordera, que investiguen,

que no malmetan ni intriguen,

que averigüen qué escucharon.

Pero en lo que ellos contaron

algo es falso o hay errores.

¿Por qué a los trabajadores

cubanos de la Embajada

no les ha pasado nada

con el sonido, señores?

 

UN VENDEDOR DE PERIÓDICOS

Mira, yo ya estoy muy viejo

y crisis he visto tantas

que aguanto lo que no aguantas,

y tranquilo, ni me quejo.

Pero, hermano, y sin complejo,

suelto una interrogación.

Si eso causa afectación

y ensordece al escuchar,

¿cuánta frecuencia hay que usar

para enmudecer a Trump?

 

***

 

Y apagué la grabadora.

Y me alejé del lugar.

Y empecé a reflexionar

Y lo sigo haciendo ahora.

La historia sigue. Hay quien llora,

hay quien protesta y escribe,

y hay quien la trama recibe

con gran naturalidad.

La Habana es una ciudad

que a las crisis sobrevive.

 

 

En fin, que el nuevo serial

“La crisis de la Embajada”

tiene a Cuba preocupada

y la Florida está igual.

¿Tendrá o no tendrá final?

¿Será o no será un “abuso”?

Cuba niega que haya incluso

equipos de alta frecuencia.

Esperemos, con paciencia,

que no tenga un final ruso.

 

 

Me voy repitiendo el título

y mientras voy caminando

van los créditos pasando…

hasta el próximo capítulo.

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