Los peloteros cubanos

Foto: Kaloian.

Foto: Kaloian.

Los peloteros cubanos

están de moda en Las Grandes.

Por donde quiera que andes

hablan de los antillanos.

Jóvenes y veteranos

después de muchas fatigas,

tras deportivas intrigas

y tras más de una batalla

están dando (al fin) “la talla”

en las Big Leagues (Grandes Ligas).

 

Parque Central. Cuba grita.

Domingo. Esquina Caliente.

¿Y Vinent? ¿Y Rey Vicente?

¿Capiró? ¿Fermín Faffita?

Este país necesita

otro Díhigo, otro Tiang.

¡Qué hubieran hecho Germán

(en la época de Canseco)

Víctor, Ulacia, Pacheco,

Javier Méndez, Kindelán!

 

Que sí. Que no. Que el pitcheo.

Que si el bate de madera.

Que si es distinto allá afuera.

Que no. Que sí. Que el bateo.

Que si les falta fogueo.

Que los scouts. Que hay millones.

Que si tienen condiciones.

Que si las cinco herramientas.

Que sí. Que no. Saquen cuentas.

Y el Yuli dando jonrones.

 

Eso es profesionalismo.

Eso es “robo de cerebros”.

Soborno. Mierda. Requiebros

que hace el Gran Capitalismo.

¿Deporte o mercantilismo?

¡Bah, no seas comunista!

Cuba es tan tercermundista…

¿Cuba sucursal del Norte?

No es política. Es deporte.

¡No seas capitalista!

 

Que si el INDER. Que si el Duque.

Que si Arocha o si Contreras.

¿Y Los Mets? ¿Y Las Panteras?

¿Y Ordoñez? ¿Y Alfonso Luque?

Asere, no se enfarruque,

allá ganas lo que vales.

Bróder, quédate si sales.

Consortico, ¡un cheque en blanco!

Guante de Oro. ¡Y era “banco”

cuando estaba en Industriales!

 

Hay contratos millonarios.

Y el joven cubano va

de Triple A, a Doble A,

A la Big… Extraordinarios

y suculentos salarios

hacen que los peloteros

se conviertan en “balseros”

o quieran ir por su cuenta

detrás de la suculenta

bacanal de “los dineros”.

 

Ni apátridas ni traidores.

Nuestros peloteros son

jóvenes con ambición,

excelentes jugadores

que quieren ser valedores

de lo que Cuba les dio.

¿Y fulano? Ya firmó.

¿Y mengano? ¡Ese se queda!

¿Y Céspedes y Cepeda

y Yuniesky? ¡Qué sé yo!

 

Yo solo sé que al final

estos jóvenes campeones

podrían con sus millones

financiar (o-kay, parcial)

nuestra Serie Nacional.

Y apartando otros asuntos

cuántos trofeos (y puntos

de consenso) ganaríamos

y qué equipazo tendríamos

si jugaran todos juntos.

 

Como pitcher abridor

(grande entre los pitchers grandes)

el joven José Fernández,

y Chapman de cerrador.

Grandal como receptor

o Alarcón o el gran Peraza.

(En cualquier terreno o plaza

de béisbol, yo les diría

que con esta “batería”,

el equipo Cuba arrasa).

 

Como parte del plantel

Alexei juega segunda

y en primera lo secunda

Pito Abreu (José Dariel)

Tercera, Yuli Gurriel

y Adeyni de torpedero.

(Con este cuadro certero

todo el que vaya a batear

se tendrá que encomendar

a los orishas primero).

 

¿Cómo enfrentarse a Yasiel,

a Céspedes y a Tomás,

sabiendo que van detrás

o Kendry o Jose Dariel?

¿Cómo pitcharle a Gurriel,

si luego Despaigne te queda?

A cualquiera se le enreda

el juego si hay que escoger

entre pictcharle a Soler

o al gran Frederich Cepeda.

 

Y un Banco que mete miedo:

Malleta, Alarcón, Yunel

Escobar, Lourdes Gurriel

o incluso Despaigne (Alfredo).

Leonis Martín (un torpedo),

Yoan Moncada (un “animal”),

Yuniesky Gurriel (igual),

Peraza (un Dios en Japón)

Y el cartel “¡Cuba Campeón!”

(Premier, Clásico y Mundial).

 

Lo piensa toda la gente

en Miami y en La Habana:

“si se unen, nadie nos gana”

“Unidos es diferente”.

Ya hasta en la Esquina Caliente

que hay en el Parque Central

dicen: si esto no va mal,

si el deporte nos coadyuva,

no habrá quien le gane a Cuba

en el Clásico Mundial.

 

En fin, que en estos momentos

los peloteros cubanos

y cubano-americanos

son jóvenes corpulentos

con especiales talentos

para el béisbol más profundo.

¡Nuestro país qué fecundo!

¡Y qué orgullo da que estén

jugando y triunfando en

la mejor Liga del mundo!

 

Nuestra isla es una infinita

fábrica de peloteros.

En estadios o en potreros

se forman. Se necesita

evitar (la causa invita)

conflicto patrio-morales,

porque ahora entre los chavales

(es otra generación)

estos peloteros son

súper-héroes nacionales.

 

Solo falta decidir

la parte más espinosa,

la parte más peligrosa,

la que nos va dividir.

¿Quién nos debe dirigir,

qué mentor nos interesa

si el team Cuba a actuar empieza

tras una bandera sola?

¿Higinio, Pacheco, Urquiola,

Jorge Fuente o Víctor Mesa?

 

POSTDATA:

 

Misterioso mensaje de whatsapp que me llegó a los diez minutos de terminar mis décimas (desde un número desconocido que comenzaba por +53):

 

Si el INDER y Grandes Ligas

dejan los mutuos castigos

tendremos “guantes amigos”

y banderas enemigas.

Si se acaban las intrigas

en Whashigton y en La Habana,

por supuesto, Cuba gana,

porque sería el Deporte

la Empresa que más aporte

a la Economía Cubana.

 

Solo le respondí que al verso 10 le sobraba una sílaba; me dijo que él era economista, no poeta. Y acto seguido me bloqueó el contacto.

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