Sinfonía Habana

¿Cuál es la foto perfecta de La Habana? ¿La imagen que la refleje en su dimensión múltiple? ¿La visión abarcadora de una realidad variopinta? La foto perfecta de La Habana, ¿será la de la ciudad concreta −piedra sobre piedra− o de la ciudad soñada, vislumbrada, sublimada? ¿Qué retratar en La Habana para encontrar el símbolo?

¿Las calles vocingleras y abigarradas, que se pierden en la lejanía brumosa del sol sobre el asfalto? ¿La línea escarpada del Malecón, la sucesión plástica de edificios emblemáticos? ¿Un solar? ¿Un almendrón? ¿Un juego de dominó en una esquina? ¿El obelisco verticalísimo de la Plaza? ¿Los juegos de puertas y columnas de la ciudad vieja? ¿El mar rompiendo en las piedras de la costa? ¿Los leones del Prado? ¿Las sábanas en los portales? ¿El niño persiguiendo palomas en San Francisco? ¿La cola de Coppelia? ¿Los mercados multicolores? ¿Las aceras sucias? ¿El Morro y su faro? ¿La Habana desde el faro del Morro? ¿La gente sentada en los bancos? ¿La gente cruzando las calles? ¿La gente montada en las guaguas? ¿La gente?

Está claro, no hay una foto perfecta de La Habana. Puede haber cientos, miles, incluso millones. ¡Qué singular privilegio vivir en una de las ciudades más fotografiadas del mundo! ¡Qué aventura adentrarse en sus palpitantes entrañas! ¡Qué sobrecogedora nostalgia al recordarla en la lejanía! La imagen perfecta de La Habana es personal, es nuestra muy particular visión, que se trenza con la de otras tantas personas en una sinfonía maravillosa. Estas fotos son un ejemplo. Gracias a todos por participar.

Texto para la galería: Yuris Nórido

Foto de portada de esta galería: Iroko Alejo

Cuba recibió a más de 3,8 millones de viajeros foráneos hasta el 21 de octubre. Foto: Francisco Ramos.
Estadio de atletismo, Ave. de los Presidentes / Beth A. Zinsli.
El Prado habanero. Foto: Ania Krupotow.
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