Hay WiFi en la calle

Desde comienzos de este mes de julio, la empresa de telecomunicaciones cubana, ETECSA, activó 35 puntos de acceso a Internet mediante WiFi en espacios públicos a lo largo de todo el país –capitales de provincia y otras ciudades de importancia–, mediante el servicio Nauta, con una con una reducción de la tarifa, de 4.50 CUC a 2 CUC por hora.

Esta paso es coherente con los anuncios del gobierno de comenzar una masificación de Internet en la sociedad cubana, que tiene como meta conseguir para 2020 la conexión de al menos la mitad de los hogares cubanos y la mayoría de las instituciones de gobierno y empresariales, incluidos cuentapropistas y cooperativas.

La opción de facilitar el acceso a Internet mediante redes WiFi, ante la carencia del cableado y los conflictos de la “última milla”, ha sido una de las recomendaciones dadas a los países del tercer mundo en busca de salvar la brecha tecnológica mediante la aplicación de últimas y más baratas tecnologías.

Según la experiencia de varios usuarios, tanto en La Habana como en otras provincias, la velocidad de acceso en estos puntos de acceso por WiFi es bastante rápida, en algunos lugares, según conoció OnCuba pueden incluso realizarse videollamadas.

“Los cubanos necesitamos Internet por el momento para comunicarnos, pero Internet no es solo para comunicarnos, hay servicios que se brindan que necesitan más ancho de banda, y no creo que 1Mbit o 2 Mbit sean suficientes” dijo a OnCuba Liván, un informático que usaba la WiFi en La Rampa habanera, sentado en una escalera de entrada de un edificio público.

El problema ahora es que, incluso en los parques de las ciudades –donde no alcanzan los bancos ni el sol perdona donde no hay árboles– , la WiFi ha traído otro conflicto urbano: miríadas de usuarios se arrastran por los pisos, muros, muritos, se trepan en las escaleras, se apoyan en las paredes; buscan un lugar donde aposentar su necesidad de estar conectados, en plena vía pública.

wifi_port3

Salir de la versión móvil