Las actas capitulares del Ayuntamiento de La Habana fueron registradas este jueves en el programa Memorias del Mundo, que coordina la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), informa la Agencia Cubana de Noticias (ACN).
El Museo de la Ciudad, en el antiguo Palacio de los Capitanes Generales de la Habana Vieja, acogió la ceremonia de inscripción de los documentos, fechados desde 1580 hasta 1899, cuando la intervención estadounidense puso fin al dominio español sobre la Isla.
Consideradas como el fondo más preciado del Archivo Histórico de la Oficina del Historiador de La Habana, las actas recogen las preocupaciones cotidianas de los habaneros en cuestiones como la tierra, el agua, el alumbrado, la alimentación, la higiene y los impuestos.
El conjunto documental contiene las documentos orginales, rescatados por el historiador Emilio Roig de Leuchsenring; así como copias, transcripciones, borradores, acuerdos y resoluciones. A través de estos escritos los investigadores han podido conocer, por ejemplo, que el abastecimiento de carne y pan fue uno de los problemas más tratados en las sesiones del Cabildo habanero en los siglos XVI y XVII.
Las actas “estaban muy bien guardadas” por Roig , “pues él fue quien trabajó con ellas”, dijo a la ACN la Dra. Nuria Gregori, directora del Instituto de Literatura y Lingüística de Cuba, quien elogió el empeño para su conservación por parte del historiador y de su discípulo Eusebio Leal, actual Historiador de La Habana, “quien siguió la tradición de su maestro”.
Precisamente, Leal fue el uno de los oradores de la ceremonia junto a Gregori, en su condición de académica y presidenta del Comité Cubano Memorias del Mundo.
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Cuba se sumó al programa Memoria del Mundo de la Unesco desde 2002 y ya se han inscrito 15 colecciones de la Isla. Entre las primeras estuvieron el Fondo José Martí Pérez, con toda la papelería del escritor y prócer cubano, y el Fondo Celia Sánchez Manduley, con escritos guardados por la combatiente y dirigente revolucionaria, muchos de ellos de la autoría del fallecido líder Fidel Castro.
En cuanto a las inscripciones más recientes, Gregori mencionó el fondo sobre la farmacia Triolet de Matanzas, que data del siglo XIX y en el que se conservan todos los archivos con investigaciones de química, sobre la eloboración de las medicinas, así como otros documentos y fotos.
Las colecciones cubanas inscriptas se reparten entre el registro internacional –en el que están el Fondo José Martí, la colección Noticiero Icaic Latinoamericano y la colección documental Vida y obra de Ernesto Che Guevara–, el regional y el nacional.
El programa internacional Memoria del Mundo fue instaurado en 1992 por la Unesco para promover la preservación y el acceso del patrimonio histórico documental de mayor relevancia, además de promocionar el interés por su conservación.
El capítulo cubano es coodirnado por el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, y entre las instituciones cubanas vinculadas a este se incluyen además el Instituto de Literatura y Lingüística, la Biblioteca Nacional José Martí, el Archivo Nacional, el Icaic, y el ICRT.
EFE / OnCuba